La era de hielo 3: Entrevista
Carlos Saldahna es uno de los artistas latinoamericanos que más se destacó en Hollywood en los últimos años en el campo de la animación.
Junto a Chris Wedge, fundador de la productora Blue Sky, que pertenece a los estudios Fox, fue responsable de la serie de La Era de Hielo y Robots.
Desde su ciudad natal, Río de Janeiro, donde promociona su último trabajo, el director concedió una entrevista telefónica a Cines Argentinos para hablar de su carrera y su nueva película.
Hugo Zapata (HZ): Carlos, miles de personas vieron tus películas en Latinoamérica pero se sabe realmente poco sobre vos y tu carrera. ¿Quiénes son los artistas que te inspiraron a dedicarte a la animación?
Carlos Saldahna (CS): Disney. Sus grandes clásicos. Películas como Dumbo, Bambi y Pinocho siempre fueron mis favoritas, porque eran trabajos muy cuidados desde la realización y la historia que resultaban totalmente inspiradores.
Inclusive hoy cuando trabajo con toda la tecnología que tenemos disponible siempre trato de rescatar esa poesía que tenían aquellos filmes.
HZ: ¿Qué edad tenías cuando dejaste Brasil para estudiar en la Escuela de Artes Visuales de Nueva York?
CS: 21. Era muy joven! Si hoy mis hijos tomaran esa decisión probablemente enloquecería! (Risas) Pero en ese momento no lo pensé demasiado. Había estudiado en Brasil computación e hice trabajos muy chicos en animación. Cuando me enteré que la escuela de Artes Visuales en Nueva York tenía un programa de arte sobre animación computada no lo dudé un minuto. Era lo que quería hacer y me fui para allá!
HZ: Entonces, ¿Cómo fue que entraste a la productora Blue Sky?
CS: Bueno, conocí a Chris Wedge en las Escuela de Artes Visuales, donde el trabajaba como profesor. Creo que fue entre 1991 o 1992. Tené en cuenta que en ese momento Blue Sky era una compañía independiente muy chiquita, que realizaba comerciales para televisión. Él trabajaba en la escuela de arte porque la productora no daba dinero en ese momento y todos tratábamos de pagar las cuentas como podíamos.
Era mi maestro en la materia de animación y desarrollamos una buena amistad. Cuando me gradué me invitó a formar parte de su empresa. Le gustaban las cosas que yo hacía y me integró al equipo.
Siempre supo que íbamos a crecer. Me dijo “Ahora somos una empresa chica pero te aseguro que vamos a hacer cosas grandes, vamos a terminar haciendo películas”.
Esa pasión, de hacer cosas grandes, de desarrollarnos en la animación me alentaron por completo y aunque al principio ganaba muy poco dinero decidí aceptar el trabajo.
HZ: En tu última película, La Era de Hielo 3, trabajaste durante tres años en la producción hasta que el proyecto estuvo terminado. ¿Cómo lidiaron tus compañeros y vos con la presión diaria que acarrea una secuela de este tipo?
CS: Sabés que es gracioso porque todo el mundo te dice es la tercera! Sale fácil!
Pero en realidad es peor. En la primera teníamos la preocupación porque le gustara al público. En la segunda, teníamos la presión de que fuera mejor que la anterior y con la tercera la presión por el éxito se sintió mucho más.
HZ: Le tenías miedo a la “Maldición de la tercera película”…
CS: Si! (Risas) Siempre pensaba en eso. Es que después que la primera tuvo éxito en la taquilla sabés que vas a hacer la segunda y el público está dispuesto a reencontrase con los personajes.
Después de la segunda las cosas son más difíciles porque no siempre salen bien. Nos esforzamos más que en las anteriores para hacer todo lo mejor posible y estoy contento con el resultado final. Cuando la veo es la que más me gustó de la tres.
Espero que podamos romper la maldición.
HZ: Bueno, mal no les fue. A propósito, en Estados Unidos ya pasó los 120 millones de dólares, pero en el resto del mundo va por los 322 millones de dólares!
Es una diferencia importante Carlos. ¿A que le atribuís el suceso internacional?
CZ: No lo sé! Es un fenómeno muy interesante. Creo que tendrá que ver con que el público en otros países se encariñó más con los personajes que en Estados Unidos. Sabés que con la promoción de la película hablé con personas de distintas partes del mundo y lo que noté es que en otros países se encariñan más con los personajes y les interesan las situaciones que atraviesan.
También tiene que ver con que es una película que la pueden pasar bien grandes y chicos y eso repercutiría también si no fuera una propuesta familiar. Pero la verdad es que a mi también me sorprende.
HZ: En esta tercera parte de la serie ¿Pensaron trabajar el formato 3 D desde el comienzo del proyecto?
CS: No desde el comienzo. Cuando empezamos a trabajar hace dos años y medio el 3D no era la sensación que es hoy. Fueron los del estudio los que dijeron: “En tres años habrá una gran demanda en este formato. Vamos a hacerla en 3D. Si no lo hacemos ahora en tres años todos los estudios van a estrenar películas en tres dimensiones y nos nosotros nos vamos a quedar atrás”.
Por eso fuimos por ese camino.
HZ: ¿Lleva más tiempo hacer la película en tres dimensiones?
CS: Si, la verdad que sí. Pensá que cuando tenemos el producto terminado nos tenemos que poner a trabajar en el 3D que se hace en post producción. En Blue Sky creamos una división especial para este tema. Es un equipo de 30 personas que sólo trabaja en el 3D.
Creo que habrán sido tres o cuatro meses más de trabajo.
HZ: Y debe ser un proceso más caro ¿no?
CS: Sí, pero tampoco es tan caro, porque la película ya está terminada. Lo que más incrementa los costos es que tenés que colorear el film otra vez. Todo lo que hiciste en la versión en 2 D luego se retoca en el formato de tres dimensiones.
HZ: Carlos ¿Crees que todavía se pueden contar más historia con estos personajes o con la tercera se cerró una etapa?
CS: Sí, podría haber otra, pero yo no me veo trabajando en la dirección otra vez.
Creo que asistiría a la producción, pero estoy seguro que el estudio ya está pensando en la cuarta. Sería raro que no sucediera porque están haciendo mucha plata en este momento.
HZ: ¿Tengo entendido que tu próxima película va a tener como escenario a Brasil?
CS: Sí, es mi próximo proyecto, se va a titular “Río”. Es un viejo sueño mío. Siempre tuve esta idea de hacer una película animada en mi ciudad. Es un lugar muy fotogénico ideal para el 3D, con los contrastes de la montaña, el océano, las estatuas y siempre quise retratar en el cine de animación la cultura carioca.
HZ: ¿Van a aparecer animalitos parlantes nuevamente?
CS: (Risas) Sí, en el caso de los protagonistas, pero esta vez también habrá humanos!
Es la historia de un Guacamayo azul que vivió gran parte de su vida y en los Estados Unidos y vuelve a Brasil para reencontrarse con sus raíces.
Es una linda historia que quiero contar pero recién estamos en preproducción.
HZ: En el último tiempo varios colegas tuyos como Gabor Csupo (Rugrats, El mágico mundo de Terabithia), Kevin Lima (Tarzán, Encantada) y Andrew Adamson (Shrek, Las crónicas de Narnia) dejaron por un tiempo la animación para trabajar en filmes de acción en vivo. ¿Te tienta seguir ese camino en el futuro?
CS: Bueno, es interesante porque en las películas que hago estoy acostumbrado a pasar el tiempo rodeado por las personas con las que trabajo y eso no sería un problema.
El tema es que amo tanto el cine de animación que la verdad no me veo en un futuro cercano dirigiendo una película de acción en vivo, aunque me da mucha curiosidad.
Creo que si lo hiciera tendría que ser algo totalmente distinto a lo que suelo trabajar. Me refiero a que sería una producción independiente de bajo presupuesto. Pero nunca se sabe!
HZ: Ok, Carlos muchas gracias por la entrevista a nuestra página.
CS: Fue un placer, mucha suerte.
Felicitaciones por la nota Hugo, no debe se haber sido facil conseguirla, por suerte se ve que Saldahna es bastante humilde y labura bien.