Young and Dangerous: La saga de Andrew Lau

Andrew Lau en la actualidad es uno de los artistas más prestigiosos del cine asiático.

En estos últimos años su carerra adquirió mayor reconocimiento policial con su trilogía Infernal Affairs que fue reversionada por Hollywood en el film Los Infiltrados.

Sin embargo en China se consagró como realizador con la saga Young and Dangerous que fue uno de los fenómenos más importantes de taquilla en ese país en la última decada.

El éxito fue tan grande que cada uno de los artistas que participaron de estos filmes se convirtieron en megas estrella super populares. También tengo que decirlo,  los filmes generaron muchísima polémica en Oriente.

Acá en Occidente lamentablemente no se les dio importancia y es una pena porque para los que somos fanas de las historias de mafiosos esto es una joya totalmente adictiva que una vez que la conocés no podés evitar recomendarla.

La saga se compone de seis películas, una precuela y varios filmes que tomaron algunos personajes de la trama central y protagonizaron conflictos independientes. Lo que en inglés se denomina spin-off.

Yo me voy a dedicar a lo largo de este año a reseñar solamente la saga principal para evitar confusiones.

Lo primero que tenés que saber sobre esta serie es que todo es cuesta arriba.  Cada película supera a la anterior y como te vas enganchando cada vez más con los personajes la serie se vuelve apasionante.

Young and Dangerous comenzó en 1996  y la última entrega, que contó con el trabajó del Gran Sonny Chiba, se estrenó en el 2000.

El éxito de la primera parte fue tan pero tan grande que las dos secuelas siguientes se estrenaron el mismo año!

La primera llegó a los cines en enero de 1996, la segunda en marzo  y la tercera en junio.

Cuando los chinos se ceban con algo no hay como pararlos.

Vale destacar que en estos casos los filmes no sólo fueron mejorando, sino que además rompieron récords en la taquilla asiática con cada estrenó y esto generó que se hagan más secuelas.

Young and Dangerous es una adaptación de un cómic muy popular en esa región del mundo titulado Teddy Boy (1992) de Lun Yu-kwok y Man Kam-hung.

El director Lau básicamente adaptó el primer film con un enfoque muy similar al que utilizó años más tarde Robert Rodríguez en Sin City.

Es decir, prácticamente, Andrew tomó el cómic como el storyboard del film y narró la historia con total fidelidad.

Esto queda claro desde el comienzo cuando descubrimos en los títulos iniciales el gran parecido que tiene los actores con los personajes que interpretan.

Inclusive el director tomó viñetas  del cómic para utilizarlas como puentes de transición de una escena a otra. Algo muy parecido a lo que hizo hace poco Walter Hill con el nuevo corte de The Warriors.

Es importante destacar tambiém que esto no es Election de Johnny To o la versión oriental de Los Sopranos.

Si buscás un drama profundo sobre la mafia china no pierda más tiempo leyendo esta nota porque esto entra en el terreno de la acción.

La películas son muy entretenidas pero no vas a encontrar  en ellas un retrato social de las Tríadas de Hon Kong. Justamente eso fue lo que derivó en la polémica, pero vamos primero con la trama.

Todo comienza en Hong Kong en 1985 cuando conocemos a quienes serám los grandes protagonistas de la saga.

Ho Nam y Chicken son dos adolescentes que junto con otros dos chicos idolatran a Uncle Bee el máximo capo de la Tríada Hung Hing.

Luego que uno de ellos resultan golpeados por el mafioso Ugly Kwan que trabaja para Bee, los pibes deciden abandonar la escuela y unirse a la organización Hung Hing, ya que saben es la única manera que tienen de complicarle la vida algun día a Kwan.

Diez años después los chicos terminan convertidos en la más importante fuerza de choque del capo Bee.

La primera película se centra en narrar la vida y actividades de lo que en la jerarquía de la mafia se suele conocer como los soldados.

El grupo  de perejiles que por lo general hacen los trabajos sucios que ordenan los grandes jefes. Son más pandilleros que otra cosa y no tiene opinión en los negocios de la familia. Sólo obedecen órdenes.

A lo largo de la trama el grupo de pibes va descubriendo que la lealtad en la mafia no existe y el único vinculo honesto que tienen en sus vidas es la amistad que tienen entre ellos.

En este primer film ya se puede empezar a ver cierto estilo de narración que más adelante se convertirá en una marca registrada de la obra de Andrew Lau.

La película no decae un sólo minuto en tiempos muertos y el director construye muy bien la tensión que se va gestando entre Ho Nam y sus amifos y Ugly Kwan.

Lau sorprendió en 1996 con este film con el enfoque realista que tuvo para narrar este cuento. Andrew abordó la dirección como si estuviera trabajando en un documental y eligió la cámara en mano como si fuera el cronista de un noticiero para introducirnos en el mundo de la Tríadas y su cultura.

El problema con este film y en realidad de toda la saga en general es que contribuyó a la glorificación de la mafia china y sus actividades.

La verdad que es un tema imposible de refutar. Me pasó a mi, que termine de ver este film y me dieron ganas de unirme a las Tríadas!

Los gángsters acá son los más cool de lo cool. Es como si Lau hubiera intentado demostrar en su trabajo que no hay nada más copado en el mundo que ser miembro de la mafia china.

Los flacos son todos cancheros y la minas están TODAS buenas. En ese sentido es muy Michael Bay la película. Andan en tremendos autos importados y no siguen las reglas de la sociedad. Las calles son de ellos.

Como se imaginarán esto generó un escándalo en los medios de China por el mensaje que dejaba el film, que por más que este basado en un cómic, no era muy positivo que digamos.

De acuerdos a varios medios perioditicos la Tríadas en Hong Kong adquirieron mayor notoriedad pública a raíz de estos filmes.

El tema es que la respuesta del público fue abrumadora y la guita que entraba en la industria del cine por la recaudación de estas películas fue descomunal. De la noche a la mañana los protagonistas se convirtieron en grandes figuras populares con los que se aseguraron el futuro de sus carerras.

No existe en la actualidad un sólo miembro del reparto de Young and Dangerous que se encuentre alejado del cine por falta de trabajo. Todos siguieron laburando en más películas y en algunos casos en la música pop.

La verdad que este film es muy entretenido y si en el pasado disfrutaste de los primeros laburos de John Woo con esto la vas a pasar muy bien.

No tenés grandes secuencias de acción con semejante nivel de realización como las de Woo pero la historia es igual de atrapante y merece su visión.

La primera parte es una muy buena presentación de los protagonistas cuyas vidas se ponen más interesantes con el transcurso de la saga.