El País de Oz: Una novela de L.Frank Baum

La saga literaria de Oz es una de las series de fantasía más subestimadas que existen en la literatura.

El impacto del primer libro fue tan grande en otros medios como el cine y la televisión que con el paso del tiempo de alguna manera terminó opacando a las grandes entregas que vinieron después.

Conozco muchísima gente que no tenía la más remota idea que Oz era una saga hasta que se los mencioné, ya que nunca habían escuchado del tema y tampoco encontraron las novelas en la librerías.

Afortunadamente hace un tiempo la editorial española Maeva, en colaboración con la mexicana Oceáno, sacó a la venta en Latinoamérica esta gran obra del maestro L Frank Baum con lindas ediciones en tapa dura que presentan los textos originales del autor.

Entre ellos la cuarta novela «Dorothy y el Mago de Oz» que es la más oscura de la saga donde el autor trabajó por unica vez los personajes con un enfoque totalmente diferente del resto de las historias.

Es importante destacar lo de los textos originales porque hay un montón de basura dando vueltas por las librerías que trabaja con los elementos de esta serie pero no tienen el nivel de los  trabajos de Baum.

Desde que los derechos de Oz pasaron a ser de dominio público aparecieron un montón de escritores que hicieron cosas con estos personajes, aunque la verdad que hasta ahora nunca pude encontrar nada decente.

En el campo de los cómics hicieron cosas mejores, pero ese es otro tema.

Baum nunca concibió al Mago de Oz como una saga literaria, fueron los niños de principios de siglo 20 lo que hicieron esto posible con la enorme cantidad de cartas que le mandaron al autor para pedirle que siguiera escribiendo más historias.

En la introducción de «El País de Oz», Baum comenta que decidió poenerse a escribir este relato luego de recibir miles de cartas de chicos que querían volver a reencontrarse con los personajes.

Este libro, publicado por primera vez en 1904, particularmente me encanta por la manera en que fue encarado.

Baum sorprendió a los lectores al dejar afuera a la querida heroína de la primera novela.

Si bien se la menciona un par de veces,  Dorothy no forma parte de esta historia y los grandes protagonistas son un niño llamado Tip y Jack Cabeza de Calabaza (mi favorito), que se convirtió en uno de los personajes más queridos de la saga de Oz.

Tip es un chico huérfano que durante años vivió al cuidado de una bruja que lo trataba como a un esclavo.

Cuando la mujer amenaza con convertirlo en una columna de mármol el joven decide escapar del lugar junto con un muñeco de calabaza que creó y cobró vida, cuando la bruja le esparció unos polvos mágicos.

Ambos personajes se dirigen entonces a la ciudad de Oz que fue sitiada por un ejército de niñas que derrocaron al reinado del Espantapájaros. Esto es genial.

Con la ayuda de Tip, Jack Calabaza, el Hombre de Hojalata y nuevos personajes que se suman al grupo, el destituido rey intentará restaurar el orden en la ciudad.

Algo que me encanta de este libro es que los nuevos personajes como Jack, el Bichovaivén y la bruja Mombi son muchos más coloridos e interesantes que los de la historia anterior, a tal punto que la ausencia de Dorothy ni siquiera se siente.

Baum te transporta a ese mundo de fantasía fabuloso que creó, en este caso con mucho más humor que en la novela anterior y un bizarro final inesperado que después de tantos años sigue sorprendiendo al lector que descubre la novela por primera vez.

«El País de Oz» fue adaptada en dibujo animados numerosas veces y la película de Disney, Regreso a Oz tomó varios elementos de esta novela en su argumento.

Un clásico de la literatura fantástica que recomiendo conseguir.