Monkey Shines

Estas son el tipo de películas por las que uno ama a George Romero.

En lo personal sus últimos trabajos  no me gustaron mucho y creo no están a la altura de sus grandes clásicos, pero cuando explorás su filmografía y te encontrás con joyas bizarras como estas entonces recordás por qué le perdonás cualquier cosa.

Esta producción, también conocida como Atracción diabólica, es un propuesta particular dentro de la filmografía de Romero porque se trata de su primer proyecto comercial para una productora de Hollywood, que en este caso fue Orion Pictures.

Hasta 1988 los filmes del director habían sido emprendimientos independientes donde él era el gestor del proyecto. En este caso lo contrataron para dirigir esta historia basada en la novela homónima de Michael Stewart.

La trama tiene que ver con un atleta que sufre un accidente al ser atropellado por un camión y queda cuadripléjico.

El hombre sufre de una gran depresión por las cond6iciones en las que vive y un amigo científico para ayudarlo decide darle una monita llamada Ella para que lo ayude en la casa.

El tema es que el científico estuvo experimentando con los monos en el laboratorio a los que les inyectaron tejido neuronal humano para hacerlos más inteligentes.

Con la ayuda de una terapeuta que trabaja con animales en un comienzo el protagonista vuelve a adaptarse a su vida, pero entonces vienen los problemas.

Entre la mona y el hombre se crea un vínculo telepático que le permite conocer los pensamientos más oscuros del protagonista.

Entonces la mona empieza a matar a todas las personas por las que el accidentado atleta siente ira.

Ya de por sí la película es rara por el hecho que en la historia el animal se presenta como la mona Ella, pero en realidad es un macho. De hecho, Monkey Shines es una de las poquísimas películas en la historia del cine que tiene como protagonista a un mono como actor.

En el 90 por ciento de los filmes con simios se trabajan con hembras, ya que aparentemente son más fáciles de entrenar.

La película tiene una premisa interesante y Romero construye muy bien la relación entre el animal y el protagonista hasta que empiezan a aparecer los elementos ridículos como los celos que siente la mona cuando se le acerca una mujer al hombre.

El trabajo del mono Boo es excelente pero el film nunca llega a ser precisamente aterrador por las situaciones grotescas que plantea la trama.

Los asesinatos de Ella en realidad generan más risa que espanto.

Algo para destacar de este film es que tuvo un muy buen elenco donde trabajaron Jason Beghe, John Pankow (de la serie Mad About You) y Stanley Tucci.

A lo mejor la película original era más seria, aunque nunca lo llegaremos a saber.

Romero tuvo bastante problemas con esta producción porque la compañía Orion editó su trabajo sin consultarle los cambios y terminaron distorsionando la visión del director.

El resultado fue un enorme fracaso en la taquilla cuando se estrenó en 1988.

Romero después de esto volvió al cine independiente pero luego hizo otra película para Orion en 1993, como fue La mitad siniestra, basada en la novela de Stephen King, con la que le fue un poco mejor.

De todas maneras, Monkey Shines es un rareza dentro de su filmografía que vale la pena conocer.