Basil Rathbone: El gran Sherlock Holmes

Hoy: El sabueso de los Baskerville.

Esto me pasó el otro día en una reunión.

El próximo sujeto que me diga que Robert Downey Jr. es el mejor Sherlock Holmes del cine debería decapitarlo con la espada de Conan y luego exhibir su cabeza en el Obelisco.

No, es un chiste, las películas de Guy Ritchie me parecieron entretenidas como propuestas pochocleras, pero la verdad que no tienen absolutamente nada que ver con el personaje del maestroArthur Conan Doyle, más allá de algunos guiños a la obra original.

El detective Sherlock Holmes tuvo muchas encarnaciones en el cine y la televisión pero hay sólo un actor que lo interpretó a la perfección.

Este hombre es a Holmes lo que Christopher Reeve fue a Superman. Es decir, pueden venir otros en el futuro y hacer un gran trabajo pero estos personajes estarán eternamente asociados a ellos.

Por supuesto en este caso me refiero a una de las grandes leyendas de Hollywood como fue ese actorazo llamado Basil Rathbone.

Basil fue una de las grandes figuras de la era dorada del cine norteamericano donde se destacó en clásicos memorables como Las aventuras de Robin Hood, Capitán Blood, La marca del Zorro, David Coperfield y Ana Karenina, entre otros famosos filmes.

Rathbone era especialista en interpretar villanos y un esgrimista de puta madre como lo demostró en el mejor duelo de espadas de la historia del cine (que todavía no fue superado) en el final de La marca del Zorro.

Basil venía del teatro como miembro de  la New Shakespeare Company donde interpretó numerosos personajes clásicos.

Un actor brillante que pese a brindar villanos inolvidables dejó su huella en la pantalla grande como uno de los más grandes héroes del género policial.

Su interpretación de Sherlock Holmes es histórica y creo que nunca será superada. Seguramente vendrán otros que podrán hacer un gran trabajo pero el Holmes de Rathbone es imposible de calcar por la sencilla razón que él definió al personaje en la cultura popular.

Por lejos el mejor actor que interpretó al personaje de Conan Doyle, que no en vano protagonizó 14 películas taquilleras con este personaje entre 1939 y 1946.

Una vez que descubrís esta saga se hace imposible asociar al detective con otro actor.

Empecemos por el primer film.

Si bien el amigo Rathbone ya había interpretado a Sherlock en programas de radio, su primer trabajo para cine con el famoso detective  se dio en la adaptación de El sabueso de los Baskerville en 1939.

Una muy buena producción de los estudios Fox por la que los visionarios ejecutivos de la compañía no apostaban demasiado.

De hecho, le tenían tan poca fe a Basil en el personaje de Holmes, por su reputación con personajes villanos, que en los créditos inciales no lo pusieron como protagonista.

Tanto en el poster como en el comienzo del film el actor destacado es Richard Greene, quien interpretó a Henry Baskerville.

La película fue dirigida por Sidney Lanfield, quien más tarde sería el realizador principal de la serie de Los Locos Addams.

Acá hizo un trabajo brillante con la adaptación de la novela de Doyle, que más allá de algunos cambios, la trama sigue con muchísima fidelidad el conflicto del libro.

Es muy fuerte ver este film por primera vez después de conocer la obra del autor inglés porque cuando lo ves en escena a Basil Rathbone es escalofriante.  Es como si Holmes se hubiera materializado de los libros y cobró vida en el cine.

El aspecto fisico, el modo de expresarse y la tremenda química con el doctor Watson hicieron que los fans de este personaje enloquecieran cuando vieron esta película por primera vez en 1939.

Watson fue interpretado por Nigel Bruce, quien luego se hizo famoso por su trabajo en los filmes de Alfred Hitchcok, Rebecca y Suspicion, sin embargo, fue esta saga  por la que sería eternamente recordado.

Pese a que la rompe con este personaje en los créditos del film recién aparece en el cuarto lugar. Tampoco le tenían mucha fe en el estudio Fox como para destacarlo como una de las figuras principales, pese a que lo era en la historia.

Hay cosas que no tienen ningún tipo de explicación lógica entre sí.

La química entre dos personas es uno de los grandes misterios de este universo.

Simplemente es algo que sucede.

La dupla que armaron Basil Rathbone y Nigel Bruce fue brillante y se destacó como uno de los mejores equipos de actores en la pantalla grande. Ellos están al mismo nivel que Bud Spencer y Terence Hill y no en vano hicieron juntos 13 película más con estos personajes.

Andá a conseguir hoy una dupla de este nivel que haga tantos filmes exitosos de manera consecutiva.

No existe.

Lo loco del trabajo de ellos es que trasladaron a la perfección esa camaradería tan especial que tenían Holmes y Watson en los libros.

Por otra parte, todo el trabajo que hicieron con la ambientación victoriana y la mansión de los Baskerville es espectacular y el director narra la trama con mucho misterio.

Contra todo los pronósticos de los ejecutivos de los estudios Fox, El sabueso de los Baskerville se convirtió en uno de los grandes fenómenos taquilleros de 1939.

En 1959 se hizo la remake con Peter Cushing y Christopher Lee que está muy buena también pero no es lo mismo.

Cushing interpretó con mucha corrección a Sherlock Holmes, en cambio, Basil Rathbone directamente era el detective encarnado en la pantalla grande.

Después del estreno de esta película la gente quería ver otra vez a Rathbone y Nigel Bruce juntos y en Hollwood no perdieron el tiempo.

Los actores volvieron a interpretar esos personajes en un radioteatro y antes que terminara 1939 Fox estrenaría otra película con el famoso detective.

Aunque eso lo trataré en la próxima nota.

Un avance de la primera película.

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