Dark Shadows: La verdadera remake

 Una gran propuesta para olvidar el bodrio que hicieron Tim Burton y Johnny Depp con este ícono del terror.

Detesté esa película porque desarrollaron una parodia, que ni siquiera era graciosa, de una historia clásica que hubiera permitido disfrutar de una buena historia de vampiros.

Tratar de explicárselo a los seguidores obsecuentes de Burton que creen que todo lo que hace el tipo es una obra maestra indiscutible es una perdida de tiempo.

La remake verdadera fue esta, la serie de 1991 con Joseph Gordon Levitt, quien era un enano de 10 años que sorprendió con su carisma y talento en esta producción.

Después de que la serie original de Dark Shadows se emitiera con éxito durante muchos años, su creador Dan Curtis decidió que era hora de presentar al vampiro Barnabas Collins a una nueva generación.

Así fue que en 1990 comenzó la producción de la remake de este clásico que lamentablemente tuvo un triste destino.

En los siguientes párrafos lo explico.

La nueva serie tuvo como caras conocidas a Ben Cross, el protagonista de Carrozas de fuego, quien interpretó a Barnabas, Joanna Going (El árbol de la vida), como la heroína Victoria Collins y Joseph Gordon Levitt en uno de sus primeros trabajos.

Ya hacía un par de años que venía apareciendo en películas hechas para televisión y acá tuvo la oportunidad de demostrar que era un niño con talento.

Joseph interpreta a Danny Collins, quien es el primero que se aviva que el primo Barnabas, no es el hombre amable y educado que aparenta y esconde un secreto siniestro.

Es muy loco verlo en esta serie porque su trabajo remite a los primeras apariciones de Haley Joel Osment y Dakota Fanning que llamaban la atención por la madurez que tenían sus interpretaciones.

Dan Curtis hizo un gran trabajo con esta serie que narró la historia clásica con un perfil mucho más oscuro.

En este remake Barnabas es un piscópata violento.

Ben Cross lo interpretó más siniestro y aterrador, que en teoría es lo que debería ser un vampiro. En este caso el personaje fue desarrollado más en la línea de lo que hizo Chris Sarandon, en el clásico La hora del espanto.

La trama se inicia cuando un hombre por error abre un cajón fúnebre que estaba perdido en una mansión y despierta sin saberlo a Barnabas Collins, quien busca a su viejo amor en la actualidad.

Dan Curtis realizó un trabajo brillante con las ambientaciones góticas y las escenas de terror que estaban muy bien logradas.

Con el transcurso de los episodios, cuando entran en juego los viajes en el tiempo, la trama se vuelve apasionante.

Dark Shadows debutó en la televisión norteamericana con excelentes críticas que destacaron de manera unánime esta re imaginación de semejante clásico.

La serie comenzó con muy buenos índices de audiencia pero al llegar al episodio número 12 la cancelaron.

Lamentablemente Dark Shadows se estrenó en el peor momento en el que podía haber surgido un programa que fue cuando estalló la Guerra del Golfo Pérsico.

La mala suerte de Dan Curtis es increíble.

De todos los quilombos bélicos que podían haber surgido le tocó uno revolucionario.

La Guerra del Golfo fue histórica por su cobertura de prensa donde la televisión jugó un papel clave como nunca había ocurrido antes en ninguna otra guerra.

En las escuelas de periodismo esto se suele estudiar en detalle porque cambió para siempre la historia de los medios de comunicación.

Con el conflicto de Kuwait, CNN se consolidó como el canal de noticias más importante del mundo.

Por primera vez la gente tuvo la posibilidad de ver en vivo las operaciones militares en el momento en que ocurrían igual que los misiles que se lanzaban a las tropas de Irak.

La cobertura mediática fue infernal y acaparó durante larguísimas horas la programación de todos los canales de ese país, cuyos noticieros se extendían durante extensas jornadas.

Esto generó que muchas producciones de ficción perdieran su público enseguida ya que los programas se posponían constantemente para darle espacio a la guerra que era lo que generaba ráting.

Las series que ya estaban consolidadas en la tele lo sufrieron menos porque tenían su público, pero para las propuestas que recién habían empezado fue fatal.

Dark Shadows era una producción importante y cada episodio costaba bastante plata, cuando la audiencia se fue perdiendo por el tema de la guerra al programa lo cancelaron y después ya no volvió al aire.

Una enorme perdida ya que era una propuesta que tenía un enorme potencial.

De todos modos hoy se pueden disfrutar los 12 episodios como una miniserie aunque haya cosas que queden sin resolver.

Si nunca la vieron recomiendo buscarla porque está muy buena.

La puede conseguir en internet y también está disponible en Netflix, con subtítulos.

Acá están los créditos iniciales. La música era buenísima.

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