Las aventuras de Adèle Blanc-Sec

ALELUYA! Al fin una película que le hizo justicia a una gran heroína de los cómics!

El director Luc Besson fue responsable de este film que representa su trabajo mas delirante hasta la fecha y mirá que hizo cosas locas.

Antes de reseñar esta producción, sin embargo, debo dedicarle unos párrafos a este ícono del cómic europeo que brindó uno de los mejores personajes femeninos creados en este arte.

Salvo que seas amante de la historieta y tengas la cabecita mínimamente abierta para saber que hay todo un mundo maravilloso de ficción, más allá de Marvel y DC y las propuesta yankees en general, la realidad es que no se le dan mucha  bola a estas geniales propuestas que surgieron en Europa.

Es un problema de difusión más que nada porque mucha gente se engancha después con estas obras cuando llega a conocerlas como me pasó a mí.

Hoy, por ejemplo, creo que nadie ofrece mejores cómics policiales que el francés Matz, que para mí es el David Fincher del género en la historieta.

Me encantan las cosas de Greg Rucka y David Lapham (Balas perdidas) también, pero obras como The Killer o Bullet to the Head, que ya reseñé en el blog, están en un nivel superior.

Y así encontrás cosas en distintos géneros.

En el caso de Adéle Blanc-Sec se trata de las más famosa creación de Jacques Tardi, un artista que dentro de este arte siempre se especializó en los géneros bélicos y policial con sus novelas gráficas.

Sin embargo, la popularidad en Europa la consiguió con las aventuras de esta heroína.

Adéle es un personaje interesante que surgió en un momento muy especial, algo que fue clave en su éxito.

A mediados de los ´70 en el cómic europeo no había personajes femeninos fuertes, con excepción de Barbarella, que anticipó la emancipación de la mujer en la sociedad de finales de los años ´60.

Tardi con Adèle fue un paso más allá y presentó en 1976 una heroína que estaba literalmente a la par de los grandes héroes masculinos del cómic.

Adéle Blanc- Sec es una periodista que a menudo se ve envuelta en casos policiales  bizarros o que están relacionados con elementos paranormales.

La joven francesa suele lidiar con monstruos prehistóricos que surgen a comienzos del siglo 20, sectas de psicópatas y la policía que la vigila permanentemente porque representa una amenaza para el gobierno.

Adèle tiene facilidad para toparse con conspiraciones y secretos científicos que las autoridades trataron de ocultar.

Entre 1976 y el 2007 se editaron 10 novelas gráficas que lograron posicionar a este personaje como uno de los grandes clásicos del cómic de las últimas décadas.

El autor Tami sólo autorizó a Luc Besson a llevar su creación al cine en lo que resultó una propuesta muy divertida que es la primera entrega de una trilogía que planea desarrollar el cineasta.

El film no adaptó ningún cómic en particular, sino que tomó elementos de varias historias para crear una producción muy influenciada por los viejos seriales de aventuras.

Besson apuntó a target familiar con este proyecto y ofreció una propuesta muy entretenida que con el desarrollo de la trama se vuelve cada vez más bizarra donde las situaciones absurdas cobran fuerza y esto se termina por convertir en un delirio total.

Es muy loco porque en el tercer acto de la trama, el film se vuelve un desquicio cuando cobran más fuerza los elementos sobrenaturales. Besson se va al carajo con las situaciones absurdas que creo le terminaron por jugar en contra a la hora de llegar con esta obra a un público más popular.

Las aventuras de Adèle Blanc-Sec fue bien recibida en Europa como hacía mucho tiempo no ocurría con un trabajo de este director (pese a que no logró ser un éxito taquillero) y en gran parte se debió al excelente trabajo de Louise Bourgoin.

Una bella actriz joven que empezó a destacarse en estos últimos años en el cine francés. El año pasado la pudimos ver en una muy buena película como fue Un suceso feliz, que llego a las salas argentinas.

Acá está excelente como la famosa Adèle donde capturó muy bien en su interpretación  todos los rasgos excéntricos del personaje.

Junto con su actuación la película se destaca por la construcción del universo de ficción del personaje y la fotografía que está al nivel de lo que Besson suele ofrecer en sus trabajos.

La única objeción que tengo para este film son los efectos digitales donde se nota que Besson o no les dio bola o no le alcanzó la plata para hacer algo más digno.

Parecería que puso todo el presupuesto en la reconstrucción de época, el vestuario y los escenarios y lo que le sobró lo destinó a los efectos especiales.

Los efectos digitales la verdad que son flojos y se ven feos. Especialmente hacia el final cuando cobran vida y protagonismo unas momias de Egipto.

En un momento esta película estuvo a punto de estrenarse en nuestro país y lo anuncié en su momento en el blog pero después por razones desconocidas la levantaron.

Es un film jodido para el público americano porque es rara de vender. Por esa razón fue que tampoco tuvo suerte en Estados Unidos.

Luc Besson que es fan de este cómic desde su infancia durante años persiguió al creador del personaje para que le permitiera hacer la película hasta que finalmente lo consiguió.

Si bien Adèle Blanc -Sec no es una obra maestra del director, creo que hizo un gran trabajo al adaptar el espíritu de esta historieta que es un clásico.

La última escena deja la puerta abierta para una continuación que esperemos pueda concretarse.

Si te gusta el cine de Besson vale la pena darle una oportunidad porque es bastante entretenida.

Este es el avance.

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