Retrospectiva Bond: Episodio 7

Hoy: Los diamantes son eternos.

¿Y ahora quién interpreta a James Bond?

Esa era la pregunta del millón para los creadores de esta saga.

Tras la incomprensible renuncia de George Lazemby, a quien le habían ofrecido un contrato para siete películas, los productores Albert Broccoli y Harry Saltzman nuevamente tenían que reconstruir la saga del agente secreto.

Esta vez los realizadores volvieron a considerar seriamente que Bond fuera interpretado por un artista norteamericano y testearon a varios actores de Hollywood. Adam West, el recordado Batman de los años ´60, estuvo entre los principales candidatos.

Luego de un extenso casting, John Gavin fue el afortunado que finalmente logró convencer a Broccoli y Saltzman para encarnar al nuevo 007.

Gabin ya contaba con experiencia en el cine y había trabajado en filmes populares como Imitación a la vida (1959), Espartaco (1960) y Psicosis (1961).

El actor firmó un contrató y se preparó para representar a Bond.

Mientras tanto, el presidente de los estudios United Artist, David Picker, estaba disconforme con esta decisión y tomó cartas en el asunto. Para el ejecutivo, Gabin no tenía el carisma necesario para interpretar a Bond y creía que la película iba a resultar un fracaso.

Convocó a su oficina al productor Stanley Sopel y le encargó una misión que parecía imposible.

Había que traer de regreso a Sean Connery. El dinero no era un problema.

A Broccoli esta noticia no le cayó bien, ya que su relación con el actor escocés no era buena pero tenía la esperanza que Connery no regresara.

La oferta que le hicieron a Connery era muy difícil de rechazar. United Artist le ofreció un salario de 1.25 millones, una cifra que no tenía antecedentes en la historia del cine.

Hoy ese número no llama tanto la atención pero en 1970 era una fortuna muy importante.

Connery ya conocía al personaje e iba a recibir un salario millonario por unos meses de trabajo.

A partir del momento en que aceptó volver a la saga de 007, Los diamantes son eternos se convirtió en uno de los filmes más esperados por la prensa y el público.

United Artist desvinculó de la producción a John Gavin y le pagó el salario estipulado que iba a recibir por este trabajo.

Con el regreso de Connery, Broccoli y Zaltsman decidieron apostar a lo seguro.

La película anterior había sido innovadora en muchos aspectos pero no recaudó el dinero que esperaban.

Esta vez decidieron recrear el éxito comercial de Goldfinger reuniendo al mismo equipo que había sido responsable de esa película.

Convocaron otra vez al director Guy Hamilton, el guionista Richard Maibaun y la cantante Shirley Bassey para que interpretara el tema principal.

En el guión original el villano era el hermano gemelo de Goldfinger, que iba a ser interpretado nuevamente por el actor Gert Fröbe.

Sin embargo, la idea no funcionó y el personaje fue eliminado cuando se sumó al equipo el guionista Tom Mankiwicks, quien años después tuvo un rol clave en la primera entrega de Superman, de Richard Donner.

De esta manera nació una de las peores películas en la saga Bond y sin duda la más olvidable entre las que hizo Sean Connery.

007 en este caso se hacía pasar por un traficante de diamantes para infiltrarse en la organización de su enemigo Erns Blofeld, quien necesitaba esas piedras preciosas  para construir un láser gigante. En este caso su objetivo era destruir la ciudad de Washington.

La película no tenía nada que ver con la novela de Ian Fleming que tenía ese título, pero incorporaba en la trama algunos personajes como los asesinos a sueldo homosexuales, Mr. Wint y Mr.Kidd.

Los diamantes son eternos se estrenó en Inglaterra el 30 de diciembre de 1971 y recibió las peores reseñas en la saga Bond hasta ese momento.

En este caso puntual estoy completamente de acuerdo con las críticas negativas.

Después de lo que había sido Al servició secreto de su Majestad los productores derraparon con una película que estaba plagada de situaciones de humor tonto.

En este film se plantó la semilla de los filmes absurdos que vendrían después donde Bond terminó siendo un chiste.

Hay una escena en esta película donde un elefante se pone a jugar en una máquina tragamonedas de un casino de Las Vegas. El animal no sólo gana dinero, sino que además festeja el triunfo!

Cómo demonios llegó a tener una situación de ese tipo una película de Bond es algo incomprensible.

Un  tipico momento «Johnnny Weissmuller» que se había evitado en esta saga en los filmes previos.

Hay otra escena donde Bond escapaba de los villanos en un ridículo buggy lunar que era muy graciosa  y la película por momentos estuvo al límite de ser una parodia.

El conflicto también era bastante malo y no tenía ningún tipo de atractivo.

No obstante, el director Guy Hamilton brindó algunas secuencias de acción que estuvieron muy bien logradas.

En esta película me gusta mucho la pelea que tiene Bond con un villano dentro de un ascensor que está impecablemente filmada.  Todo la situación se desarrolla en un espacio muy limitado y la coreografía dl la lucha es impecable.

También sobresale la persecución automovilística por las calles de Las Vegas que se destacó entre los mejores momentos de esta producción.

El resto la verdad que fue para el olvido.

LOS VILLANOS.

ERNS STAVRO BLOFELD.

En mi opinión la peor encarnación del personaje.

Después de lo que había sido la genial interpretación de Telly Savallas, los productores eligieron a un actor que no tenía el carisma necesario para encarnar a Blofeld.

Charles Gray ya había aparecido en Sólo se vive dos veces con un rol secundario y acá le dieron un papel más importante que para mi no le hizo justicia a este gran villano.

De todas la versiones de Blofeld esta es la más olvidable de todas.

Gray años después se hizo famoso por su rol de experto en criminología en el musical de The Horror Picture Show.

MR. WINT.

Esta dupla de asesinos a sueldo en la versión cinematográfica parecen personajes de dibujos animados de la serie El show de Rocky y Bullwinkle.

Mr Wint fue interpretado por Bruce Glover, papá de Crispin Glover (Volver al futuro) que siempre trabajó en roles secundarios.

Otros filmes conocidos de su filmografía fueron Walking Tall (1973), Barrio Chino (1974) y Hard Times (1975).

Este fue su personaje más conocido.

MR.KIDD.

Putter Smith es un conocido músico de jazz que en los años ´70 incursionó en la actuación como hobby.

Nunca exploró demasiado la carrera y este fue su film más relevante.

LAS CHICAS BOND.

TIFFANY CASSE.

Por lejos, la chica Bond más tarada de toda la saga.

En esto no tiene nada que ver la actriz Jill St.John, quien era muy bella y no actuaba mal. El problema fue la manera en que estuvo escrito su personaje.

Veníamos de ver a la esposa de 007, Tracy di Vicenso, que era una mujer inteligente y estaba a la par del protagonista y ahora Bond se relacionaba con una chica torpe y tonta que no aportaba nada en el conflicto.

Luego de trabajar en esta película la actriz abandonó la actuación durante un tiempo y se convirtió en una conocida cocinera de la televisión norteamericana.

Desde 1990 está casada con el actor Robert Wagner con quien trabajó en varias ocasiones.

PLENTY  O´TOOLE.

Otra chica Bond completamente desaprovechada.

Más allá de mostrar sus llamativos pechos en una escena su participación en la historia no tenía razón de ser.

Plenty fue interpretada por Lana Wood, la hermana menor de Natalie Wood, que ya había debutado en el cine con el clásico de John Ford, The Searchers.

Luego de este film apareció en varias producciones clase B, entre ellas, las películas del Capitán América que se hicieron en los años ´70.

BAMBI.

Otros personajes sin sentido que apenas aparecían en una escena fueron Bamby y Thumper que eran una especie de guardaespaldas del millonario Willyad White, quien estaba inspirado en Howard Hawks. Los nombres de estos personajes era una referencia al clásico de Disney, Bambi.

Ninguna de estas dos mujeres fueron reconocidas en los créditos de la película.

Lola Larson que interpretó a Bambi era una famosa gimnasta Olímpica y este fue su único trabajo en el cine.

THUMPER.

Trina Parks fue la primera actriz negra en interpretar a un personaje con diálogo en un film de James Bond.

Luego de este film trabajó en numerosas obra de teatro y especiales de televisión.

En Hollywood es más conocida por su labor como coreógrafa en espectáculos musicales.

Otra película famosa donde apareció fue la primera entrega de Los Blue Brothers.

Los diamantes son eternos recaudó 116 millones de dólares, principalmente por la expectativa que generaba el regreso de Connery pero tampoco fue muy bien recibida por el público.

Desde los inicios del proyecto ya se sabía que Connery no iba a regresar para otra película y una vez más los productores Broccoli y Saltzman debían buscar al actor indicado para esta saga que empezaba a mostrar ciertas fisuras.

El avance original.

https://www.youtube.com/watch?v=-va1qL-UaqY