Sniper: Ghost Shooter
Una saga del cine de acción literalmente construida gracias al apoyo de los fans.
Como mencioné en la nota anterior, los realizadores encontraron un mercado enorme en Rusia y Asia, donde las ventas de dvd de esta franquicia funcionaron muy bien y contribuyeron a impulsar la producción de más entregas.
Pese tratarse de filmes de bajo presupuesto que son considerados basura popular por los críticos en Estados Unidos, Sniper consiguió hasta ahora brindar propuestas de acción decentes.
En algunas ocasiones las historias presentaron secuencias de acción completamente superiores a los filmes realizados por las grandes compañías de Hollywood.
Las tramas no son estúpidas y el cuidado en los aspectos visuales generó una base de seguidores alrededor del mundo.
Ghost Shooter, la sexta entrega, representa el cierre de la segunda trilogía protagonizada por el francotirador Brandon Beckett, el hijo del marine interpretado por Tom Berenger en el film original de 1993.
En esta ocasión regresa por tercera vez a la serie Billy Zane en el rol del soldado Richard Miller, quien se convirtió en un mentor de Beckett Jr.
La nueva película estrenada este año fue dirigida por Don Michael Paul, responsable del film anterior, Sniper: Legacy.
En este episodio el cineasta copió de manera obvia la estética y el enfoque de la acción de la serie 24 con Kiefer Sutherland.
Desde la tipografía de los créditos iniciales, pasando por la edición y las secuencias de tiroteo, la fotografía y muy especialmente la música, Ghost Shooter recrea la impronta artística de la serie de Fox.
Inclusive Dennis Haysbert, el recordado presidente Palmer, en esta historia tiene más participación en el rol del jefe de Miller y Beckett jr.
En la trama de este film ambos soldados son asignados para proteger una refinería de gas en Europa, que es acechada por terroristas. Las cosas se complican cuando miembros del equipo de francotiradores empiezan a morir producto de una filtración del enemigo en el equipo.
Como elemento a favor de este film debo destacar el desarrollo que le dieron los guionistas al rol de Beckett jr, quien pasó de ser un soldado novato en Sniper: Reload a un francotirador más experimentado que sigue los pasos de su padre.
En Ghost Shooter hay toda una subtrama muy interesante donde el protagonista se replantea su carrera militar y siente remordimiento por los asesinatos que le encargan, un conflicto interno que rara vez vemos en los filmes de acción clase B, donde el protagonista es una máquina de matar.
Eso son pequeños elementos que contribuyeron a hacer más interesante esta saga.
En materia de acción la película es impecable y presenta muy buenas secuencias de acción de tiroteos que tiene el suspenso necesario para hacer atractiva la trama.
La labor del director encuentra su mayor debilidad en el tratamiento de la acción a gran escala, donde los efectos digitales no quedaron bien terminados.
Todas las escenas donde se disparan misiles o intervienen aviones se nota claramente el uso del CGI que se implementó mejor en el film anterior.
Salvo por ese detalles, Sniper: Ghost Shooter es otra entretenida entrega de esta serie que logra brindar un buen entretenimiento a los seguidores del género.
Queda por esperar que se re-encuentren en la saga los personajes de Tom Berenger y Billy Zane, quienes iniciaron esta franquicia en 1993.
El avance de Sniper: Ghost Shooter.
Vamos a buscarla que de la última trilogía solo vi la primera.
Hugo que otras sagas clase B recomendas ahora vi la de the marine de ese y zafan
Perdón quise decir de la productora wwe. Me falló el auto corrector de Android
No estuve viendo otra, la que me viene a la mente ahora, Ninja, con Scott Adkins, pero son dos películas nada más.
he visto la primera y la tercera, la verdad muy buen entretenimiento.
Como se llama la canción con la que empieza y acaba la película