Tarzán y las joyas de Opar

 Tarzán y las joyas de Opar es una de las novelas más destacadas de esta saga literaria, donde se puede apreciar de manera excepcional el talento de Edgar Rice Burroughs en el género de aventuras.

En la quinta entrega de la serie, publicada en 1916, el autor retomó las raíces del personaje luego de ese extraño experimento que fue El hijo de Tarzán donde el hombre mono había tenido un rol muy secundario.

Muchos lectores se quejaron por esta cuestión en su momento y es evidente que Burroughs intentó recompensar a los seguidores de su obra en el siguiente trabajo.

Esta historia desconoce por completo los hechos del hijo de Tarzán a tal punto que jamás es mencionado a lo largo del conflicto.

La historia podría ser leída luego del tercer tomo, Las fieras de Tarzán, y esto no afectaría en absoluto la cronología de la saga, ya que no hay ninguna mención al hijo adulto del protagonista.

Burroughs ofrece en este caso una propuesta de aventuras donde logran mantener el suspenso del relato hasta su conclusión, debido a los numerosos enredos y giros que toma el relato.

Lord Greystoke un día descubre que los malos manejos de su fortuna que hicieron sus apoderados en Londres casi dejen a su familia al borde del a quiebra.

Para resolver esta situación, John Clayton decide emprender una expedición a la tierra de Opar (que ya había descubierto en el segundo libro, El regreso de Tarzán) con el objetivo de buscar un tesoro que podría revertir su situación económica.

Mientras el protagonista se prepara para su aventura entra en escena Albert Wepner, un oficial belga renegado que tiene la misión de matar a Lord Greystoke, por orden de un jeque árabe que tiene un gran rencor hacia el héroe.

Wepner se hace pasar por un explorador perdido y logra que John lo hospede en su casa y lo sume a su expedición en Opar.

El conflicto se dispara cuando un terremoto que afecta la región de Opar frustra los planes del protagonista.

Lord Greystoke pierde el conocimiento cuando una enorme roca golpea su cabeza.

Al despertar se encuentra afectado por la amnesia y su personalidad de explorador aristocrático se revierte a la de Tarzán de los monos.

Wepner escapa de Opar y regresa a la casa de los Gresystoke para secuestrar a Jane, pero cuando llega al lugar descubre que otro jeque árabe destruyó el lugar y se apoderó de la esposa de Tarzán para venderla como esclava.

El hombre mono que no tiene recuerdos de su pasado vaga entones por la selva, perseguido por La, la sacedortisa de Opar, que se propone conquistarlo nuevamente.

Burroughs hace un gran trabajo con los distintos giros que tiene el conflicto y las adversidades desesperantes que enfrentan los protagonistas.

En esta novela se destacan especialmente con muy buenos momentos, el guerrero africano y amigo de Tarzán, Mugambi y Jane, quien demuestra una vez más que no tiene nada que ver con la damisela en apuros que inventó Hollywood.

La quinta entrega de la serie vuelve a trabajar las mejores cualidades de Tarzán que se extrañaban en el libro anterior y ofrece una gran propuesta de aventuras plagada de acción y suspenso.

Tarzán y la joyas de Opar se convirtió en una de la novelas más populares del personaje y en su siguiente trabajo Burroughs siguió enfocado en el hombre mono con la antología Relatos de la jungla, que exploró a través de cuentos la infancia y adolescencia del héroe previo a su encuentro con Jane.

Si te gusta este personaje el quinto libro es uno de los tomos imperdibles que no se puede ignorar.