Historia de Wonder Woman
Capítulo 20: Wonder Woman en la Era de Bronce
El regreso de Robert Kanigher
Dentro de la historia de los cómics se conoce a la Era de Bronce como el período que transcurrió entre los comienzos de los años ´70 y 1985.
Una etapa de enormes transformaciones en los equipos artísticos de las editoriales y el contenido de las revistas.
El cambio más significativo fue que el cómic dejó de ser visto como un pasatiempo infantil para pasar a convertirse en un medio artístico que funcionaba como un retrato de la sociedad contemporánea.
Una etapa de madurez que se registró especialmente en el género de superhéroes, donde los conflictos raciales, la corrupción política y la adicción a las drogas pasaron a ser temas comunes en los argumentos.
En lo personal soy un gran amante de esta etapa tanto, en Marvel como en DC, porque brindaron cómics inolvidables que hoy los lees después de tantos años y no perdieron relevancia.
En esta cuestión jugó un papel clave el recambio generacional entre los artistas, donde los escritores que venían trabajando desde los años ´50, le cedieron el lugar a una nueva camada de ilustradores y guionistas que aportaron una visión fresca y diferente de los personajes.
Entre ellos sobresalieron la dupla que conformaron Denny O´Neil con Neil Adams en DC, además de Frank Miller, John Byrne, George Perez y Jim Starlin entre tantos otros.
La era de Diana Prince que sigue siendo menospreciada por la gente que no conoce demasiado este personaje, en ese sentido fue una gran precursora del rumbo que tomarían los cómics en los años ´70.
Un cambio que luego terminó por consolidar Marvel en 1973 con la muerte de la novia de Peter Parker, Gwen Stacy a manos del Duende Verde.
Ese fue el gran punto de inflexión en este arte que sirvió como un pasaje a la madurez y las temáticas más oscuras en los argumentos.
En este mismo período los X-Men revivieron gracias a jóvenes artistas como Len Wein y Dave Cockurn, quienes lograron encontrarle la vuelta a los mutantes en un campo donde habían fallado Stan Lee y Jack Kirby en los años ´60.
Durante la Era de Bronce los artistas se fortalecieron como sindicato y lograron obtener los derechos de sus creaciones, además de conseguir el crédito correspondiente en las revistas.
Algo que no ocurría en la Era de Plata donde no se mencionaban a los nombres de ilustradores o guionistas. Cambios que se impulsaron cuando se descubrió que los creadores de Superman, Jerry Siegel y Joe Shuster, vivían en la pobreza.
Para Wonder Woman este fue un período espectacular donde el cómic consiguió finalmente encontrar su solidez hasta 1985, pese a que la entrada en la Era de Bronce resultó algo ríspida.
La peor noticia que podían haber tenido los fans de la amazona en 1973 fue el hecho que Robert Kanigher regresara a la revista.
Si bien el artista se destacaba en el género bélico (su gran especialidad) y también se desenvolvía muy bien con los héroes masculinos, a Kanigher le costaba muchísimo trabajar a las heroínas.
El polémico autor tomó control del cómic en el numéro 204 (1973), que anunciaba en la portada el regreso de la Wonder Woman original.
La trama comenzaba de un modo intenso con un francotirador psicópata que mataba gente desde la terraza de un edificio.
Su primera víctima era una editora de una revista femenina llamada Dottie Cottonman, que era una clara referencia a Dorothy Woolfolk, la antigua asistente de William Marston y creadora de la Kriptonita en las historias de Superman, quien editaba cómics románticos en DC.
Un chiste de mal gusto que no cayó bien en su momento, aunque Kanigher lo vio como una humorada que no tenía la intención de lastimar a la artista.
La siguiente víctima del asesino fue I-Ching, el mentor de Diana en las artes marciales, que moría ejecutado de un modo brutal. Una clara venganza de Kanigher y pase de factura a Denny O´Neil por la muerte de Steve Trevor.
Diana lloraba la muerte de sus mentor a quien consideraba «el padre que nunca tuvo» y enseguida salía a enfrentar al psicópata.
Aunque la protagonista lograba detener al delincuente, un golpe en la cabeza durante una caída la dejaba inconsciente.
Diana se despertaba en un hospital sin recordar nada sobre su vida y por una cuestión de instinto emprendía la búsqueda de la Isla Paraíso.
Finalmente se encontraba otra vez con su madre y las amazonas, quienes descubrían que la princesa sufría amnesia.
Hipólita entonces decidía restaurarle todo sus recuerdos, con una particularidad especial. Todas sus vivencias con I-Ching y su etapa de Diana Prince eran borrados.
Esto fue una clara señal a las feministas que habían rechazado la visión de Denny O´Neil. Todas esas historias quedaba eliminadas del recuerdo de la protagonista y en la páginas siguientes se resumía el origen tradicional de la heroína.
Diana recuperaba su poderes otra vez y empezaba una nueva vida en Nueva York como guía turista de las Naciones Unidas.
Junto con dos compañeras, una mujer negra y otra asiática, decidía compartir el alquiler de un departamento.
En las páginas finales de este número aparecía una carta de Kanigher donde describía la nueva etapa como «un regreso sentimental a los orígenes del personaje».
El problema era que el texto estaba ilustrado con cubiertas de algunas de las historias más patéticas que había escrito el autor durante la Era de Plata.
Muchos lectores abandonaron el cómic y esto afectó severamente las ventas.
Por ese emotivo el regreso de Kanigher fue mucho más breve de lo esperado.
En honor a la verdad es justo destacar que el trabajo del escritor tuvo una primera etapa interesante, donde brindó probablemente una de las mejores creaciones de su carrera.
En su manía por incluir elementos bizarros o disparatados, Kanigher no pudo con su genio y en esta nueva etapa presentó a Nubia, la hermana negra de Wonder Woman.
Estoy convencido que después de Barry Allen (Flash), Nubia fue la mejor creación de Kanigher, aunque lamentablemente en DC nunca la llegó a desarrollar.
La historia de la hermana negra de Diana era muy buena y tenía un concepto interesante.
En la trama se revelaba que la Reina Hipólita había creado dos estatuas de cera, Diana y Nubia.
Sin embargo la niña negra había sido criada por Marte, el dios de la guerra, fuera de Isla Paraíso.
Algo que explicaba su energía masculina desproporcionada. En un comienzo Nubia se presentaba como una antagonista de Diana con un temperamento mucho más violento e intentaba quitarle su rol de Wonder Woman en la Tierra.
Sin embargo, luego se reconciliaban cuando Nubia descubrían que Marte le había lavado el cerebro para aniquilar a su hermana.
Las dos amazonas entonces se enfrentaban con el dios de la guerra y luego de vencerlo formaban una alianza.
No se entiende como los artistas de DC luego dejaron escapar un personaje tan fascinante.
Nubia presentaba la contracara de Diana y resolvía los conflictos a través de la violencia, algo que generaba una dinámica muy interesante en la relación de las dos hermanas.
Como mencionaba al comienzo, en la Era de Bronce de los cómics la minorías raciales fueron reivindicadas y por ese motivo aparecieron personajes como Luke Cage, Iron Fist, Tormenta de los X-Men, Cyborg, Mantis y Misty Knight entre otros.
Nubia fue una de las pioneras entre las heroínas negras y básicamente era un típico personaje de Pam Grier en formato de cómic.
Cuando surgieron sus historias la actriz se encontraba en el pico de su popularidad y no fue casualidad que Nubia tuviera la personalidad fuerte de Foxy Brown.
Lo interesante del personaje además fue que la amazona vivía en el continente africano y sus historias estaban relacionadas con la mitología de esa cultura.
Hoy probablemente tendría su propia serie de televisión y no me sorprendería que la revivieran en DC.
Debo ser justo en esta cuestión.
Nubia fue una gran creación de Kanigher y DC intentó darle más popularidad con una línea de muñecas que hoy son objetos valiosos para los coleccionistas.
Un detalle loco de la muñeca y el motivo por el que tiene una gran valor es que el juguete se vendió como parte del merchandising de la serie de televisión protagonizada por Linda Carter.
Originalmente el personaje iba a ser interpretado por Teresa Graves, la primera actriz negra en la historia de Hollywood que protagonizó su propia serie de televisión, como fue Get Christie Love! (1974).
Sin embargo los productores luego dejaron afuera al personaje, pese a que ya se había fabricado el juguete como parte del merchandising de la serie.
En los números siguientes se puede percibir una crisis de Kanigher con lo que era el surgimiento de la Era de Bronce que claramente no pertenecía a su generación.
Al leer estos cómics queda la sensación que el autor luchaba por mantener el perfil serio que le había dado Denny O´Neil al cómic y su estilo personal con las excentricidades que lo caracterizaban.
Un claro ejemplo de este problema lo encontramos en el número 205 (1973), donde la trama lidiaba con la temática del terrorismo que había cobrado fuerza en esa década.
El argumento no estaba mal.
Diana prevenía un atentado en la ONU pero la historia se iba a pique cuando Kanigher hacía una de las suyas.
El líder de los delincuentes era una sujeto cuya cabeza era una pieza de dominó…
A partir del número 207 (1973) se produce un cambio en el staff del cómic y las ilustraciones quedan a cargo de Ric Estrada, quien no tuvo mejor idea que restaurarle a Diana el horrible look de la Silver Age.
Kanigher volvió a su juego y presentó otra vez argumentos estúpidos que retrasaron 30 años el cómic, al vincular a Wonder Woman con diversos alienígenas ridículos.
La heroína que pedían las feministas había regresado pero la gente que compraba el cómic en serio se alejó de la colección y las ventas decayeron por completo.
Kanigher presentó su última historia tonta en el número 210 (1974), que parecía un cómic escrito en 1956. Era claro que su etapa estaba terminada y no podía acoplarse al perfil que tenían las historietas en la Era de Bronce.
La crisis de la revista era tan grande que el número 211 (1974) fue un reimpresión de 100 páginas con historias de la Silver Age.
En otra palabras, el partido homenaje de DC a Robert Kanigher, quién nunca más volvería a ser parte de Wonder Woman.
El autor pasó a dedicarse a otros proyectos donde hizo cosas más decentes para DC, como Rima, la chica de la jungla, un clon femenino de Tarzán basado en la novela Green Mansions (1904), del argentino William Hudson, y Ragman, un buen anti-héroe místico que co-creó junto Joe Kubert.
A Wonder Woman nunca pudo encontrarle la vuelta y labor con el personaje fue muy mala.
Sin embargo sus grandes obras la desempeñó con otras propuestas como Flash, Sgt Rock, G.I. Combat, Our Fighting Forces y el resto de sus cómics bélicos y los Metal Men, que sobresalen también entre lo mejor de sus creaciones.
En Junio de 1974 otro legendario veterano de DC como Julius Schwartz asumió como editor de Wonder Woman, un artista que había sido uno de los creadores de la Liga de la Justicia, además de impulsar la carrera de Denny O´Neil.
El problema era que a Schwartz la princesa amazona no le interesaba en absoluto.
Sin embargo, como buen editor que era tomó la decisión adecuada y delegó la revista en una de las nueva promesas del cómic norteamericano.
A los 26 años, Len Wein, quien luego sería el co-creador de Wolverine, La cosa del pantano, Nighcrawler, Tormenta y Coloso en los X-Men, además de editar Watchmen, quedaba a cargo de los guiones de Wonder Woman.
De esa manera, la princesa amazona volvía con toda su gloria a los cómics en una etapa inolvidable.
Continuará.
Los setenta la mejor epoca de los cómics de DC y Marvel!!! O será que fue la década de mi infancia y los primeros que leí???
No, fue una época gloriosa para ambos. Igual que los ´80.
Lees esos cómics de adulto y los disfrutas más todavía.
No suelo ser políticamente correcto, pero me da gracia cuando dice «Nubia! My BLACK sister! jaja
Vos sabes que yo nací en el 69, leo comics desde antes de aprender a leer (miraba los dibujos fascinados) y siempre senti que los comics crecieron junto conmigo. Me siento un afortunado de pertenecer a esta generación.
Hugo el otro dia me enteré, no se si lo sabías, que Watchmen originalmente iba a ser una novela con los personajes de la Chralton. DC después decidió incorporarlos a su universo durante Crisis y Alan Moore debió invertar personajes nuevos para concretarla.
Sí leí algo de eso hace un tiempo.
El lugar del Dr Manhatan origianalmente era del Capitan Atomo, Rorschach era The Question, Nite Owl era Blue Beetle con nave y todo, y así para cada personaje. Me hubiera gustado mas con estos personajes!!!
Lo que pasa que hubieran hecho un lía con la continuidad de DC, que de todos modos ocurrió por aquellos años.