Ms Fisher’s Modern Murder Mysteries
Debido a que una Miss Fisher no era suficiente en este mundo ahora se sumó también la sobrina para continuar con su legado.
Ms Fisher’s Modern Murder Mysteries es una propuesta reciente de la televisión australiana que funciona como una continuación y spin-off de la serie original protagonizada por Essie Davis.
En este caso la trama se desarrolla en 1963 y tiene como figura principal a una sobrina de la detective Phryne Fisher, hija de una hermanastra que nació a raíz de una infidelidad de su padre.
Sí, sacaron un conejo de la galera para justificar la existencia de la nueva heroína, todo sea por el entretenimiento.
Esta producción dividió las opiniones entre los fans australianos de la serie original.
Hubo espectadores que rechazaron a la sobrina de Phryne y otros que la recibieron con un mayor entusiasmo.
En lo personal me cayó bien y creo que es una producción que se disfruta mucho si te gusta la cultura pop de los años ´60 y tenés claro por donde va esta propuesta.
En lugar de copiar la serie original en un contexto diferente los productores apostaron por hacer algo diferente y en este punto es donde los puristas de Miss Fisher pusieron el grito en el cielo.
La historia comienza cuando la detective de los años ´20 termina desaparecida durante una exploración en Nueva Guinea. Nunca se detalla si murió sino que se perdió todo rastro de ella,. Tengo una teoría del motivo por el que tomaron esa decisión, que luego explicaré.
Cuando pasa el tiempo y Phryne no aparece el club de aventureras al que pertenecía decide ejecutar un testamento que ella había dejado un tiempo atrás.
Todas sus pertenencias se las deja a su sobrina Peregrine Fisher, quien es una muchacha… especial.
En la primera serie la protagonista representaba el arquetipo clásico de la típica chica flapper de los años ´20.
Phryne fumaba y tomaba alcohol, se acostaba con todo los tipos que deseaba y tenía un comportamiento más liberal dentro de la sociedad a la que pertenecía.
Por el contrario, Peregrine es exactamente lo contrario, en parte porque se crío en un contexto cultural diferente.
Cuando conocemos a la protagonista es una empleada torpe de un salón de belleza que casi le quema el pelo a una clienta y tras su despido descubre que heredó una fortuna de su tía, que supuestamente habría fallecido.
Al tomar contacto con las posesiones que le dejaron, incluido el clásico revólver dorado, Peregrine decide incursionar en el campo de los detectives privados pese a que los amigos de Pryne se oponen inicialmente.
De este modo nos encontramos con una nueva heroína que tiene poco que ver con la investigadora de los años ´20.
Peregrine está más cerca de la clásica Nancy Drew de la literatura que la Miss Fisher que conocimos en la serie original.
Rara vez anda a los tiros y cuando usa un arma no suele tener una gran puntería y su talento para resolver casos pasa más por su sagacidad para encontrar pistas.
Su personalidad también es menos promiscua y con el desarrollo de la serie se convierte paulatinamente en el arquetipo clásico de la It girl de los años ´60.
Esta es otra particularidad que presenta la nueva serie donde se desarrolla una construcción del personaje principal.
Peregrine comienza como una chica algo torpe que no sabe que hacer con su vida y de a poco se convierte en una detective con mayor confianza en sí misma que obviamente evoca la recordada y querida Emma Peel de la clásica serie Los Vengadores.
Un guiño que está muy presente en los coloridos y llamativos vestuarios que usa, inspirados por el movimiento cultural del Swinging London de los años ´60.
Otra referencia a Los Vengadores la encontramos en el protagonista masculino, un policía llamado James Steed, que homenajea al viejo John Steed que encarnó Patrick McNee en aquella obra maestra del género.
La relación entre Peregrine y el detective juega mucho también con la dinámica que tenía el vínculo entre Emma y Steed que se desenvolvía en el coqueteo permanente entre ellos.
Como ocurrió con la serie original la reconstrucción de época es alucinante.
Si te gusta el período de los años ´60 esta serie es la gloria por todos los detalles que tiene en la ambientación, los vestuarios y por supuesto la banda sonora en la que suenan clásicos de ese período.
Creo que un motivo por el que hicieron a Peregrine tan diferente de Phryne es que queda abierta la puerta para que la detective original pueda reaparecer en algún momento ya que no está oficialmente muerta.
Esa reunión podría ser magnífica por la diferencia de personalidades entre la tía y su sobrina que brindaría una dupla muy divertida.
Otra particularidad de Ms Fisher Modern Mysteries es que la serie se desarrolló a través de cuatro películas de una hora y media de duración, en lugar de entregas semanales.
Un tema que se relaciona con el costo de producción que tiene cada episodio.
Por el momento se consiguen en internet las dos primeras entregas y Netflix todavía no la subió a su programación.
En lo personal me gustó esta continuación porque propone algo diferente a la versión original que sigue vigente a través de películas.
Peregrine, encarnada por la actriz Geraldine Hakewill, tiene carisma y una personalidad atractiva y a partir del segundo episodio, donde ya está establecida como detective, la serie se vuelve más interesante.
Un avance de esta producción que no tuvo todavía demasiada difusión fuera de Australia.
Ví la serie de Miss Fisher en Netflix y me gustó mucho, por lo que comentas en tu reseña creo que esta propuesta es muy prometedora, ojalá el gigante de Streaming la suba pronto a la programación.
Creo que está bueno el giro con las características de la sobrina (mejor incluso con la caída en clichés feministas que estamos viendo en muchas ficciones) y comparto con vos en que sería genial el broche de oro con una dupla sobrina y tía.
Aguante el blog de Hugo en época de cuarentena!!!