Historia de Wonder Woman: Volumen IV

CAPÍTULO 2: DC RETROACTIVE Y LA REDENCIÓN DE DENNY O´NEIL

Durante el 2011, antes que la editorial DC relanzara todo el universo de ficción con una nueva colección (que presentaría algunas de las peores versiones de los personajes clásicos) surgió un proyecto nostálgico dedicado a homenajear algunas facetas historicas de los superhéroes más conocidos.

Con el título DC Retroactive estos especiales recrearon con argumentos originales diversas etapas de los cómics entre los años ´70 y ´90.

La particularidad del proyecto fue que trajo de regreso a muchos artistas que estaban retirados o no trabajaban con estos personajes desde hace más de 20 años.

Los especiales estuvieron dedicados a Superman, Batman, Green Lantern, la Liga de la Justicia, Flash y por supuesto Wonder Woman.

En el caso de la amazona esta trilogía de historias sirvió para mitigar un poco el desastre que se vendría en breve con el relanzamiento de la heroína a cargo del autor Brian Azarello.

A continuación veremos las características de cada especial y los autores convocados.

Los años ´70: Denny O´Neil

Si siguieron las notas previas de este informe ya saben que no concuerdo con el ensañamiento desmedido que hubo en su momento contra Denny O´Neil y su poca feliz idea de covertir a Diana en Emma Peel, la famosa espía de la serie Los Vengadores.

Si bien la mayoría de sus ideas no funcionaron, ese período fue el primer giro fresco (aunque radical) que tuvo la historieta en más de 30 años, luego de permanecer estancada en la estupidez absoluta.

Denny la pifió a la hora de quitarle a Wonder Woman los poderes para convertirla en una chica Bond que andaba a las piñas junto a un maestro de artes marciales, que además era un burdo estereotipo racista.

Sin embargo también hubo algunos aciertos que fueron muy productivos para la revista y permitieron que este título se posicionara otra vez entre los best-seller de DC.

La Wonder Woman Mod no duró dos semanas sino un par de años entre 1969 y 1973.

Durante ese período la personalidad de Diana adiquirió un caracter más vulnerable ( que se confundió con debilidad) y las tramas tenían como telón de fondo temas sociales de aquellos días, como la Guerra de Vietnam o los movimientos feministas que uno podía encontrar con facilidad en propuestas de Marvel pero con menos frecuencia en DC.

Salvo por algunas excepciones como Batman, Green Arrow o Green Lantern.

Con todos los errores que pudo cometer O´Neil, cuando el artista dejó la revista Wonder Woman era un personaje menos superficial, tras el período banal de Robert Kanigher.

En el 2011 Denny volvió a escribir una historia con la amazona después de 30 años para DC Retroactive en lo que fue prácticamente un pedido de disculpas por sus malas ideas del pasado.

El argumento que tiene algunos tintes humorísticos gira en torno a la redención.

La isla de Themyscira desaparece y un extraño ente (una representación de la conciencia del autor probablemente) convoca a la heroína para que cumpla con tres tareas con el fin de reparar sus pecados del pasado.

El ente entonces la transporta en el tiempo con la vestimenta donde comenzó su caída espiritual representada en el icónico traje blanco.

Lo que sigue es una aventura psicodélica donde el O´Neil se disculpa por sus ideas radicales durante el período en que fue el guionuista de esta publicación.

El arte estuvo a cargo del canadiense J.Bone, cuyo arte retro fue una elección perfecta para este especial. El dibujante es más conocido por el gran especial entre Batman y The Spirit del 2006.

Cabe recordar que pese a toda la controversia que generó la etapa de Denny en su momento, sus historias se convirtieron en una curiosidad de culto, a tal punto que DC celebró el período hace poco con un tomo de lujo de tapa dura que recopila todas los comícs de aquellos años.

LOS AÑOS ´80: ROY THOMAS

Para homenajear las historias de los años ´80 la editorial optó por concvocar a Roy Thomas en lugar de George Pérez que hubiera sido la elección más obvia.

Me pareció estupenda esta decisión porque sirvió para destacar a un gran escritor que no quedó en el recuerdo por su labor con la amazona.

Ya analicé su etapa en entregas pasadas de este informe.

Thomas, quien fue el creador de Red Sonja para Marvel, restauró por un breve período la calidad (y sobre todo la diginidad de la heroína) en esta revista tras el apso de una serie de artistas a los que claramente no les interesaba esta propuesta.

Lamentablemente el ciclo de Roy duró muy poco porque la editorial no lo dejaba desarrollar historias cortas, ya que en ese momento el cómic incluía un complemento con The Huntress.  Por ese motivo el escritor se alejó del proyecto.

Pese a todo, ese breve tiempo fue fantástico y brindó algunas de las mejores aventuras de Diana antes de la llegada de Pérez.

Su mejor obra fue la espectacular trilgía épica, Judgement in Infinity! que se desarrolló entre los números 291 y 293 (1982) y reunió por primera vez en la historia de DC a todas las heroínas juntas en un mismo conflicto.

En el especial Retroactive, Thomas ofrece una entretenida historia ambientada en 1983, durante el período en que Diana trabajaba como empleada del Pentágono.

Los ilustradores Rick Buckle y Joe Rubinstein hicieron un gran trabajo a la hora de replicar la estética quie tenía el arte de la historieta en aquellos años.

LOS AÑOS ´90: WILLIAM MESSNER-LOEB

Mi numero favorito de esta trilogía que también le hizo justicia a un autor olvidado que no tuvo el reconocimiento que se merece por su labor con la heroína.

El problema con Messner-Loeb fue que su obra quedó opacada por las ilustraciones del brasileño Mike Deodato, con la hipersexualizada Wonder Woman Stripper.

Un cambio estético mucho peor del que había presentado Denny O´Neil en su momento.

Sin embargo, los relatos del autor tenían una enorme calidad donde exploraba muy bien la psicología de los personajes.

Su labor con Etta Candy y sus trastornos alimenticios fue brillante y ofreció el mejor retrato de la amistad entre Wonder Woman y su clásica compañera.

También contribuyó a que la heroína se relacionara más con otros superhéroes, donde sobresalió un gran Team Up con Flash, el personaje con el que más se destacó el autor en su carrera.

Messner-Loeb tuvo que lidiar con el desafío de reemplazar a George Pérez y cuando le encontró la vuelta a Wonder Woman, algo que se dio de un modo gradual, ofrecio muy buenos momentos.

Su contribución para Retroactive fue brillante.

En 27 páginas resume de un modo contundente todo los valores que representan a esta superheroina y que la diferencian del resto de los personajes femeninos de Marvel y DC.

En la trama, que tiene varios momentos humorísticos, Diana tiene que cuidar a las dos hijas de la hermana de Etta Candy y sus amigas, que son un grupo de adolescentes sedentarias.

A partir de esa premisa el autor desarrolla una aventura con un mensaje muy positivo sin la necesidad que el personaje ande a las piñas. Las ilustraciones en este caso fueron responsabilida de Lee Moder.

Estos especiales tuvieron 50 páginas y los nuevos relatos fueron acompañados por la reedición de un número claro del periodo explorado.