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3-COWBOY BEBOP (1998)

La más grande obra maestra que surgió en la animación en las últimas décadas, que además califica entre las mejores series japonesas de todos los tiempos.

Existen muchos motivos para enamorarse de Cowboy Bebop y cada espectador tiene su motivación personal.

En mi caso me voló  la cabeza al combinar temáticas y generos literarios, cinematográficos y musicales de los que ya era fan antes de conocer esta producción.

Nunca me voy a olvidar la conmoción que me generó ver Asteroid Blues, el capítulo inicial.

Apenas me había terrminado de recuperar tras la apertura épica de los créditos iniciales que suena ese riff de guitarra típico de la canciones bluseras de Elmore James.

Fue la primera vez donde sentí que me encontraba frente a una obra artísitica que había sido concebida para mí.

Tenía blues, jazz, rock and roll, spaguetti westerm, ópera espacial, mecha, cine de acción clásico, cyberpunk, cine de artes marciales, comedia absurda, el hard boiled chino de John Woo y policial negro.

Todas las cosas que me gustan aparecían combinadas en una misma historia.

Perdí la cuenta la cantidad de veces que la repasé y siempre le encuentro algún detalle nuevo en el que no habia reparado.

Por eso también me parece una aberración la idea que tenga una adptación live action, completamente inncesaria, en Netflix.

Sobre todo en una compañía que tiene una obsesión enfermiza con con la agenda moralista de la actualidad.

Hay determinas obras maestras que no hay que tocarlas ni reversionarlas.

Ya de por si el realismo que le aporta al animé el estudio Sunrise genera que una adaptación live action resulte redundante.

Todo lo que se va a conseguir es una representación hollywoodense lavada para la comunidad de you tubers que son fans de todo.

Al pedo.

De hecho, si hay algo que le valoro a Shinichiro Watanabe, el creador de Cowboy Bebop, es que pese al fenómeno cultural que generó su obra nunca se desbandó por el camino marketinero de Hideaki Anno con Evangelion.

Cuando la serie llegó a su fin en el episodio 26 la cortó ahí y no hubo relanzamientos o continuaciones.

El único complemento fue el largometraje del 2001 que es una historia autoconclusiva que se ubica entre los capítulos 22 y 23 de la serie original.

Supuestamente Watanabe en la serie de Netflix fue asignado como «consultor creativo» que se traduce a «te pagamos un cheque generoso para que no nos tires el fandom en contra cuando veas lo que hacemos con tu obra».

El punto es que no es un proyecto de él y luego de Cowboy Bebop siguió adelante con otras excelentes producciones como Samurai Chanploo, Space Dandy y Michico y Hatchin.

El problema con esta producción es que fue tan buena que probablemente nunca logre concebir otra obra que genere el mismo impacto.

Animés de este tipo surgen una vez cada 20 años y no se pueden repetir con facilidad.

No hay un sólo motivo para amar a Cowboy Bebop, es una suma de factores que van desde la calidad en la realización a las composiciones musicales de Yoko Kanno y esa familia disfuncional que conformaban los personajes, que nos brindaron una éxperiencia única y especial dentro del génerio.

Y sí, Spike vive.

2-THUNDERCATS (1985)

Control Remoto.

Lunes a vienes a las 18 horas por Canal 13, conducido por Guillermo «Macu» Mazzuca.

Se trataba de un ciclo juvenil que tenía juegos y videos clips ochentosos.

Un día de la nada misma aparecieron los Thundercats y enloquecimos.

(La semana que viene me voy a referir a los juguetes.)

La única serie de ese momento que consiguió opacar a He-Man, She-Ra, Transformers y G.I joe en los indíces de audiencia en los Estados Unidos.

En Argentina llegó dos años después, en 1987, y tuvo la ventaja que el fenómeno de Amos del Universo se había calmado bastante.

Por consiguiente, era el momento perfecto para ver algo nuevo y la rompío entre los niños.

Contar con una de las más grandes aperturas de todos los tiempos fue una ventaja, pero la serie en materia de contenido era excepcional.

Ya de entrada le pintaba la cara a la competencia con el nivel de calidad artística que tenía la animación y ni hablar de la banda sonora rockera con esos solos de guitarra que te rompían la cabeza.

El que no idolatró a Pantro o se enamoró de Cheetara (con todo lo freak que eso puede resultar) es un sucio y vil mentiroso.

Toda la bajada de línea espiriitual que tenía relacionada con la apertura del charka del tercer ojo (la espada del augurio) y los guias (Jaga) eran elementos de vanguardia.

Tal vez no lo entendías en ese momento pero estaba presente en el contenido.

Los villanos, por Dios.

Antiguios espíritus del Mal transformern este cuerpo decandente en Mumm-Ra ¡El inmortal!

Frases que nos quedaron grabadas en la memoria,

Mumm-Ra era terriblemente cool y aterrador a la vez y a diferencia de Skeletor con este no se jodía. Era un par de Hordak en ese sentido.

Un detalle interesante de esta producción es que fue creada por Ranking-Bass, una compañía independiente que en la televisión por entonces había sido opacada por Filmation, Hanna-Barbera y DIC.

La productora fue pionera en la animación stop motion y consiguió una enorme popularidad con el clásico corto navideño del reno Rudolph, que se emite todos los años en la tele norteamericana desde 1964.

Durante la década de 1980 ellos concentraron su atención en el cine, donde brindaron películas emblemáticas como las adaptaciones de Tolkien, realizadas por Ralph Bakshi, The Flight of Dragons y esa hermosa obra maestra de la fantasía que fue El último unicornio, basada en la novela de Peter Beagle.

Sin embargo, no contaban con un producto sólido para competir en la televisión.

Motivo por el cual, cuando aparecieron con los Thundercats, se convirtieron en el gran tapado de la industria del que nadie esperaba nada en ese momento.

Los personajes fueron concebidos por Leonard Starr, responsable de revivir el cómic de Annie a fines de los años ´70, que después derivaría en el fenómeno del musical de John Huston.

Debido a que Ranking-Bass era una empresa chica y no tenía la estructura para producir una serie televisiva, la realización la derivaron al estudio japonés Pacific Animation Corporation, que marcó la diferencia.

Desde un punto de vista estrictamente técnico Thundercats y los Halcones Galácticos fueron obras de animé y ofrecieron una calidad visual muy superior a las cosas que se hacían en los Estados Unidos.

A raiz del suceso de estos proyectos luego Disney los contrató para hacer todas la series populares que mencioné en esta lista y las que surgieron en los años ´90.

En el 2011 se hizo una remake que duró una sola temporada.

Si bien fue aclamada por la prensa y tuvo su nicho de seguidores no despertó pasión de multitudes.

En mi caso  no me disgustó pero sentí que le faltaba la magia de la original, por más que buscaran darle una mayor profundidad a la mitología de los Thundercats.

Otro detalle genial de la versión de los ´80 es que a lo largo de las cuatro temporadas presentaba arcos argumentales extendidos que se desarrollaban como miniseries.

Por ejemplo, Las pruebas de León-O, que fue un clásico del primer ciclo.

Dentro de los héroes de los ´80 estos fueron diferentes y desarrollaron historias con más contenido.

Mención especial para el excelente doblaje latino que le pinta la cara a la versión en inglés.

Muy especialmente con Mumm-Ra donde Antonio Monsell se comió el personaje.

No me voy a a cansar nunca de ver esta apertura.

Más allá del tema musical que es tremendo, la síntesis con la que introduce a los personajes y el concepto del programa es brillante.

 1-ROBOTECH (1985)

La serie que nos hizo crecer.

Asi de simple.

Nunca faltan los puristas del animé y Macross que la hacen mierda y disparan su odio contra Carl Macek «porque arruinó el verdadero mecha con una pirateada».

Pendejos que ni siquiera eran un proyecto de feto cuando esto surgió en 1985 y nos quieren dar clase de animé a los que la vivimos en ese momento.

Sin Robotech, Macross, Capitán Futuro, Harlock y Cobra entre tantos otros títulos hubieran tenido el mismo destino que Gundam.

Es decir las hubierámos descubierto a comienzos del siglo 21 a través del auge de internet, como ocurrió con los otros animés de Rumiko Takahashi, que se emitieron en unos pocos países de Europa y nunca llegaron a Latinoamérica.

Esto no significa tampoco canonizar a Harmony Gokd y Macek pero hay que ver las cosas desde la perspectiva histórica adecuada.

En lo personal creo que estuvo mal que no les reconocieran a los artistas japoneses el mérito de las obras que comprende Robotech y fue incorrecto que intentaran apropiarse de su autoria, pero es necesario analizar las cosas con equilibrio.

Frank Agrama, el fundador de Harmony Gold, era amigo íntimo de Silvio Berlsuconi y tenía conexiones con gente «pesada», La integridad no era su mayor fuerte y terminó condenado en Italia en un juicio por fraude y evasión de impuestos.

Los quilombos de la productora recién se resolvieron el mes pasado y es probable que tengamos muchas novedades interesantes con respecto a esta franquicia en un futuro cercano.

Ahora bien, todas estas cuestiones legales teminan siendo intrascendentes porque lo más importante es lo que Robotech generó en nuestras vidas.

Para la generación de niños de los ´80 representa el mayor evento cultural que trasnformó cabezas y originó un romance inmortal con el animé.

Si la propuesta te impactaba internamente ya no había vuelta atrás y la devoción por el mecha no iba a ser una «etapa infantil».

Es una pasión que te llevás al cajón, como les puede suceder a los hichas de futbol o los fans de Kiss y Iron Maiden que son como una raza aparte dentro de la humanidad.

Y acá viene la parte más complicada.

Si no la viviste en ese momento jamás vas a saber lo que fue esa experiencia al repasar la serie en Netflix.

El freak de Dragon Ball es el que puede entender mejor esta cuestión, ya que ahí tenés una segunda evangelización del animé con otra propuesta diferente, pero que marcó a fuego a esa generación.

Para los que la vivimos con mucha intensidad fue un momento mágico e inolvidable de ese período de la vida y ocupa un lugar especial entre las pasiones personales.

Eso no significa que no se pueda después apreciar a las obras originales.

Ahora cuando escuchás la fanfarria de apertura de Ulpio Minucci hay algo en tu interior que se moviliza y te emocionás porque es tu saga personal.

No son Hikaru Ichiyo y Misa Hayaase, son Rick y Lisa y los recordaremos así toda la puta vida aunque a los puristas sensibles les moleste.

Robotech inevitablemente se asocia también con cierta perdida de la inocencia.

Una historia donde descubrimos que la guerra no era joda y la gente se moría y eso tenía un impacto emocional.

Intentá encontrar un fan de la serie que no quedara traumatizado con la muerte de Roy Focker.

No entendíamos nada.

Pero si lo héroes son inmortales, ¿cómo que se murió?

No tenía internet, ni foros de discusión.

Había que aguantarse la angustia en soledad, completamente desconcertante para tus padres, hasta que se emitiera el siguiente episodio.

Llegábas a la escuela triste al otro día y tampoco encontrás respuestas porque tus amigos tampoco entendían nada.

Roy estaba bien y de repente se murió tocando una guitarra mientras Claudia le preparaba una ensalada.

No pasaron muchos días que asimilaste la historia y caen Ben en plena batalla.

Muerte seca, súbita y sin aviso, como en la guerra.

Por eso también la conexión emocional con todos estos personajes es tan grande, debido a que fue un dibujo animado que se vívía con otra intensidad.

Después estaban todos los culebrones románticos apasionantes donde era una novedad ver que los protaonistas se besaban.

Más allá de estos detalles, Robotech fue también una saga que disfruté desde su concepción de monstruo Frankenstein, en la idea de vincular Macross con  Super Dimension Cavalry Southern Crossy Genesis Climber Mospeada, que no tenían nada que ver entre sí.

Hay también un mérito de Macek en darle un hilo narrativo para construir una saga de tres generaciones.

La segunda entrega Maestros de la Robotecnia nunca despertó pasión de multitudes pero después con la expansión de la historia a través de los cómics llegué a valorarla más y hoy la verdad que la disfrutó.

La nueva generación, el tercer ciclo argumental, recuerdo que fue muy popular y nos enganchó con esas motos espectaculares.

No puedo dejar de mencionar también que crecimos viendo una serie donde uno de los grandes héroes era una Drag Queen.

Lancer, guerrillero de día y cantante femenina de noche, que encima tenía muy buenos temas.

Hay un cómic que explica su origen.

Esta es mi saga, la que más me identifica y la que escojo por el resto de los dibujos animados,

Un programa que además incluyó un doblaje extraoridinario con las interpretaciones de Jesús Barrero, Patricia Acevedo y Alvaro Tarcicio (Gloval).

El redoblaje para la versión remasterizada en dvd ,que contenía escenas censuradas, no lo odié como otros fans pero me quedo con el primero obviamente.

Protocultura blog y archivo de comics

 Robotech va más allá de los 86 episodios de la serie animada y la historia se expandió en numerosas colecciones de cómics que durante mucho tiempo fueron imposibles de conseguir.

En el blog argentino que hoy es Archivo de cómics hicieron un trabajo épico en la maquetización y traducción de estos materiales con el que se ganaron el cielo para todos los fans de esta franquicia

Entre las cosas magníficas que tienen se encuentra la saga de los Sentinelas que narra las aventuras de Rick y Lisa tras el final de Macross.

Hay una película animada en dvd que fue el piloto de una serié que después se canceló y la trama siguió a través de la historieta.

Esta etapa termina con la miniserie Preludió a las Crónicas Sombrías que fue otro proyecto frustrado, pero por lo menos cierra ese ciclo.

Les dejo el linlk para visitar la página que además está muy bien organizada y ofrece un orden de lectura.

Protocultura cómics.

 El final consuelo

Aunque la serie original dejó colgado el destino  de Rick y Lisa en la SDF 3 y después Harmony Gold no tuvo suerte con las Cronicas Sombrías el final definitivo se encuentra en esta gran novela de Jack Mckinney que cierra todos los cabos sueltos.

No es lo mismo que disfrutar la trama en la animación pero al menos te queda la satisfacción de darle un cierre a la saga.

El autor adaptó la serie original en la literatura y este libro retoma la historia a partir del final de la Nueva Generación.

Actualmente se encuentra disponible en Amazon.

Final del viaje

Tarea concluida.

Millones de gracias a todos los que siguieron este informe (¡durante cuatro meses!) hasta el final.

En lo personal fue uno de mis trabajos favoritos en los 13 años que llevo del blog  y si bien disfruto todas las notas, esta lista por su extensión fue muy especial.

Yo les recomendé un montón de cosas que me gustan pero también encontré recomendaciones de cosas que no había visto, como los ovas de Hellsing que tengo pendientes.

Si tienen ganas me gustaría que compatieran en los comentarios sus top 10 o por los menos la cinco series favoritas que marcaron su vida.

Yo comparti mis 350, no les pido mucho.

De todos modos esto no terminó y se viene una semana nostálgica a modo de bonus track.