Supergirl: El Weird Western de Tom King

En los últimos años Supergirl atravesó un ciclo de renovación muy interesante con novelas gráficas que exploraron diversas facetas de la personalidad de la heroína.

Algo que no se daba desde el ciclo de Peter David a mediados de los años ´90.

En el 2016 la compañía DC publicó la miniserie de Mariko Tamaki, Being Super, centrada en problemáticas del coming of age y en el 2021 surgió Woman of Tomorrow (que hace poco se editó en castellano) a cargo de Tom King.

Uno de los autores más celebrados de la última década quien por estos días es responsable de la serie regular de Wonder Woman.

King tiene una historia de vida muy interesante ya que su vocación artística explotó en la adultez luego de abandonar la CIA, donde se desempeñó como agente de campo en operaciones de contraterrorismo.

Algunas de sus experiencias luego las volcó en la ficción en esa gran miniserie que fue Grayson (2014) que abordaba al personaje dentro del género de espionaje.

En lo personal me gusta bastante King ya que sus obras tienden a ser una caja de sorpresas donde nunca sabés con certeza lo que vas a encontrar.

Cuando está inspirado te saca cosas fantásticas como Grayson, la serie de Mr. Miracle y Love Everlasting (una interesante exploración de los cómics románticos desarrollada dentro del terror psicológico) y cuando la pifia por lo general toca fondo y te inspira a tirarle un zapato en la cabeza.

Una emoción que generó la horrenda Heroes in Crisis que despertó la furia de los fans de Wally West y Roy Harper, el clásico compañero de Green Arrow.

DC luego tuvo que arreglar el desastre que hizo con esos personajes.

Woman of Tomorrow es una propuesta que tiene la particularidad de reunir las cualidades y los defectos habituales que aparecen en las obras de este autor.

Voy a resaltar primero lo positivo.

La historia presenta una aventura de Supergirl dentro del Weird Western donde King adapta la premisa argumental del clásico True Grit (Temple de acero) en el subgénero de la ópera espacial.

Kara encarna una versión femenina del místico pistolero Rooster Cogburn inmortalizado por John Wayne en el film de Henry Hathaway  de 1969.

En lugar de Mattie Ross en esta versión tenemos a Ruthye, una chica alienígena que contrata a la kriptoniana para vengar la muerte de su padre.

A partir de esa premisa los personajes emprenden una aventura a través de planetas excéntricos que el autor aprovecha para explorar aspectos más psicológicos de Supergirl.

Keing reinventa los orígenes de Kara y le otorga un espacio destacado al estrés post-traumático que padece la protagonista producto de la destrucción de su planeta.

La miniserie de ocho episodios, editada en formato de novela gráfica, cuenta con el tremendo arte de Bliquis Evely que eleva la propuesta a otro nivel.

Nos encontramos ante esa clase de comics que después de leerlo lo podés repasar simplemente para disfrutar la belleza de las ilustraciones.

Toda la puesta en escena de los planetas es fascinante junto con el retrato de las secuencias de acción, en la que sobresale especialmente la aparición de un caballo volador.

El cómic lamentablemente termina debilitado por el típico vicio de Tom King quien tiene el hábito de usar 500 palabras para expresar cosas que podría narrar en 50.

Esto deriva en un relato espeso, por momentos monótono, donde el concepto de la historia resulta arruinado por las numerosas escenas de exposición que piden a gritos la intervención de un editor.

En este caso King desarrolla la trama desde la perspectiva de Ruthye quien narra los hechos como si se tratara de una novela del siglo 18.

Para el momento en que llegás al tercer episodio la alienígena se volvió infumable con su relato pretencioso.

Woman of Tomorrow por momentos trae al recuerdo las series de televisión actuales que duran ocho episodios y dejan la impresión que cinco fueron de relleno.

Para mi gusto a King le faltó un baño de cine western y un refuerzo de suspenso en el tratamiento del conflicto.

Apuesto plata a que esta cuestión será remediada en la próxima adaptación live action que prepara James Gunn.

En el cine a DC no le quedan más balas de plata y si Woman of Tomorrow se adapta con el mismo tono contemplativo la película resultará un bodrio ya que se queda corta en materia de acción y situaciones emocionantes.

Tampoco tienen que retocar demasiado.

Si se elimina la narración densa de Rhutie y refuerzan el contenido de suspenso creo que es una gran propuesta de Supergirl.