Dead Air: Bill Moseley contra los zombies

Una buena propuesta para alquilar en el video con uno de mis actores favoritos.

Me refiero por supuesto al señor Bill Moseley, quien se destaca en esta producción independiente que no llegó a los cines.

Dead Air es una entretenida historia de zombies que remite bastante a The Crazies de George Romero y 28 Días de Danny Boyle.

El film fue dirigido por Corbin Bernsen, un actor muy conocido en la televisión de Estados Unidos. En este caso presentó un film muy influenciado por el cine de Romero.

No me refiero al hecho que tenga que ver con zombies, sino que brinda una historia de terror que más allá del entretenimiento tiene un comentario social sobre los tiempos que corren.

Dead Air no deja ser una  radiografía de la era Bush y la paranoía que se produjo en ese país tras los atentados del 11 de Septiembre.

Es interesante porque retrata a los Estados Unidos con una mirada más cercana a la que tienen muchos países en el mundo.

Bill Moseley es un locutor exitoso de radio que tiene un programa nocturno en la ciudad de Los Ángeles.

Una noche unos terroristas arabes logran perpetrar un atentado donde propagan un peligroso virus que convierte a la gente en zombies pscópatas que matan a todo ser vivo que tiene en frente.

En principio Mosley y su equipo no creen en las noticias hasta que empiezan a sonar en la radio testimonios de personas que relatan masacres en las calles y se dan cuenta que están atrapados en la  radio.

La película marca el regreso al género de Patricia Tallman (El éjercito de las Tinieblas) que ya había trabjado con Moseley en la remake de La noche de los muertos vivos que dirigió en los ´90 Tom Savini.

La verdad que Dead Air es una producción clase B de bajo presupuesto donde intentaron hacer lo mejor que pudieron con la guita que tenían disponible.

En mi caso no me pareció tan terrible. Comparado con los efectos digitales de la remake de It´s Alive esto por lo menos es  un poco más decente.

Lo mejor de este film es el trabajo de Bill Moseley, donde tuvo la oportunidad de mostrar una faceta diferente de su talento.

Acá no interpreta al clásico freak pervertido que suele hacer en producciones de este estilo.  En este caso es un hombre común y corriente que intenta sobrevivir frente a la locura que se desató en la ciudad.

Se trata de un rol más dramático que le pemitió destacarse desde otra óptica.

La verdad que es su presencia en la historia lo que hace que la visión de este film valga la pena.

Moseley tiene la virtud, al igual que Samuel Jackson, que puede participar de filmes malos pero siempre queda bien parado por el trabajo que brinda.

En Estados Unidos le pegaron bastante a esta película y la verdad que no es para tanto.

Reitero, con las porquería que se producen por estos días en Hollywood dentro del género Dead Air zafa y brinda un buen entretenimento.

Especialmente recomendada para los fans de Moseley.