El Fantasma de la Ópera

El fantasma de la Ópera es uno de los grandes íconos del mundo del terror y como sucede con otros grandes clásicos populares como Dracula, Frankenstein o Tarzán, no conocés al personaje realmente hasta que tomás contacto con la fuente que lo originó.

Podés haber visto la obra de Broadway cinco veces en Estados Unidos y tener una colección con todas las mejores películas que se hicieron sobre esta historia, pero recién llegás a descubrir al fantasma cuando leés la genial obra de Gastón Leroux.

Este escritor es fascinante y más allá de haber creado a este ícono también fue responsable de una de la mejores novelas de suspenso como el El misterio del cuarto amarillo. Aunque esa es otra historia sobre la que me referiré en otro momento.

La novela de Leroux presenta la trama del fantasma como si se tratara de una crónica policial, donde el autor apunta a revelar los terribles hechos que ocurrieron en el teatro Ópera Garnier de París a fines del siglo 19.

Leroux basó su trabajo en una famosa leyenda urbana de París que se refería a un fantasma que vivía en el principal teatro de la capital francesa.

Para disfrutar de este libro creo que es necesario olvidarte de todo lo que creías conocer sobre esta leyenda.

El autor presenta un drama gótico que sobresale por combinar a la perfección los géneros del suspenso y el romance, algo que es muy díficil de lograr.

Eric, el fantasma, en el libro es un ser mucho más aterrador y peligroso que la figura romántica que historicamente se mostró en el cine. El tipo es un genio de la música, eso es indiscutible, pero también es un lunático cuya soledad lo terminó por convertir en un ser sumamente desquiciado.

Algo que me pareció grandioso de este libro es el desarrollo que tiene el fantasma a lo largo de la trama. Detrás de ese asesino implacable que uno conoce en la primera parte de la novela se esconde un ser deforme carente de afecto durante toda su vida y es el monstruo, quien termina siendo el héroe de la novela. Para Hollywood eso siempre resultó un problema.

Esto explica el hecho que las películas que se hicieron basadas en el trabajo de Leroux siempre distorsionaron los hechos y retrataron al protagonista como un villano. Ni hablar del musical de Andrew Lloyd Webber, que esta bárbaro pero se aleja demasiado del fantasma original.

Para el autor de la novela esta historia fue cierta y su narración juega con esto al presentar la trama como una investigación periodística que el lector sigue a través de entrevistas, informes policiales y notas de diarios de la época.

La descripción que hace Leroux del teatro de la Ópera, las catacumbas donde vive el gran protagonista y «el cuarto de los suplicios», que es una escalofriante sala de torturas donde el fantasma somete a sus víctimas son maravillosas y representan una clara muestra del talento del autor para hipnotizar al lector con su relato.

El Fantasma de la Ópera fue publicada originalmente como una serie de historias entre el 23 de septiembre de 1909 y el 8 de enero de 1910. No fue para nada un éxito comercial y recién llegó a ser popular a mediados del siglo 20. En la actualidad es considerado un clásico de la literatura francesa.

En la primera imagen se puede ver la tapa original que tuvo la edición orginal de 1909.

Si les interesa este libro les recomiendo que consigan la edición de la editorial Gárgola que presenta la obra completa de Leroux con un prólogo buenísimo de Alberto Laiseca.