12 Razones de Por Qué la Amo
Un cómic que se ganó un lugar en mi Top Ten 2010.
12 Razones de Por Qué la Amo es una gran novela gráfica de amor que sobresale por el realismo y la honestidad que con la que el autor trabaja la relaciones de pareja.
Es interesante porque el género de romance en los cómics es uno de los más bastardeados que existen en la actualidad, cuando dentro de este arte décadas atrás fue tremendamente importante.
Todos los grandes artistas en algún momento trabajaron con esta clase de relatos en el comienzo de sus carreras.
De hecho, Joe Simon y Jack Kirby, los creadores del Capitán América, fueron los grandes padres del género romántico en los cómics.
En estas propuestas las temáticas que se trabajaban eran los celos, las traiciones, el casamiento etc. Por lo general los personajes protagonistas eran adolescentes y jóvenes adultos.
Young Romance, la gran creación de Kirby en su momento llegó a ser tan censurada como Los cuentos de la Cripta por los temas que trataban la historietas que eran bastante reales, pero para los censores de la dévada del ´50 no era apropiado.
Es gracioso pero los cómic románticos, que tuvieron su apogeo entre 1947 y 1977 (fecha en la que Kirby dejó de publicar Young Romance) terminaron muriendo por las misma razón que se vieron afectadas revistas como Creep o The Vault of Horror.
La censura.
Con la llegada de la revolución sexual y la liberación de la mujer en muchos aspectos sociales los artistas se vieron imposibilitados de trabajar esos temas en las historietas y los lectores abandonaron las revistas porque estaban totalmente fuera de época.
En estos últimos años el género revivió un poco con propuestas interesantes. Los japoneses con el manga fueron quienes con su propio estilo mejor se adaptaron a los nuevos tiempos y en la actualidad siguen publicando muchas cosas de este tipo.
En Occidente si bien no volvió a aparecer una revista como Young Romance a través de las novelas gráficas se hicieron cosas muy interesantes.
12 Razones de Por Qué la Amo es un ejemplo de ello y es genial por la experiencia que le brinda al lector.
Toda la historia gira en torno a la relacion sentimental entre dos jóvenes llamados Evan y Gwen que como toda pareja tiene sus altos y bajos en la convivencia.
El cómic es tan realista que cuando lo leas vas a tener la sensación de estar espiando la cuestiones íntimas de una pareja real.
Es como disfrutar de una película de Richard Linklater (Antes del amanecer) pero en historieta.
Los diálogos son terriblemente honestos y en ningún momento el cómic cae sentimentalismos pedorros de novelas mexicanas.
Jamie S.Rich y Joelle Jones nos presentan la historia de los protagonistas en 12 capítulos con la particualaridad que la trama no se cuenta de manera lineal.
Al principio esto me pareció un poco confuso pero cuando terminé de leer la trama entendí lo que los autores se propusieron hacer.
Todas la piezas del rompecabezas conforman una misma unidad que es la historia de amor entre los protagonistas donde no importa tanto en que orden se dieron la cosas, sino lo que vivieron los personaje con los altos y bajos de la relación.
Cada episodio está marcado por una canción que recomiendo buscar en You Tube para hacer más divertida la experiencia de la lectura.
Salvo por Nancy Sinatra la mayoría de los artistas no son muy conocidos pero hay un par temas buenos que funcionan muy bien en la historia.
El arte de Joelle Jones es fabuloso y representa otro de los puntos fuertes de esta propuesta. Una ilustradora muy interesante para seguir. Este fue su primer trabajo importante.
Si disfrutaron en el cine de películas como 500 días con ella definitivamente van a pasarla bien con la lectura de esta gran novela gráfica que no va a decepcioanar a aquellas personas de espíritu romántico.
El cómic de Oni Press fue editado en castellano y se consigue en las librerías especializadas.
curioso que menciones a kirby en algo asi, no tenia ni idea.si no leia eso ni bola le iba a dar a esta reseña.
Es que hay vida más allá de los superhéroes. Todos los grosos de la historieta tienen algún trabajo que va a contramano de las cosas por la que se los asocia.