El Señor de los Ladrones

Cornelia Funke es una de las autoras más interesantes que surgieron en los últimos años dentro de los géneros de aventuras y fantasía.

Su trabajo más famoso es la trilogía de «Corazón de Tinta» (arruinada en Hollywood al condensar estúpidamente los tres libros en un mismo film) que es la obra con la que se hizo famosa alrededor del mundo.

Lo que me gusta de Funke es que su bibliografía es bastante diversa. Tiene libros para niños pequeños que son fabulosos para incentivar la lectura en los más chicos y otros trabajos para más grandes que te conectan con los clásicos de la literatura.

«El Señor de los Ladrones» representó su debut en el año 2000 y es una buena novela que les va a gustar a los lectores que en el pasado haya disfrutado de Charles Dickens, Ray Bradbury o J. M. Barrie.

En este libro el espíritu de todos ellos está bastante presente.

La trama tiene como protagonista a Próspero y Bo, dos chicos que escapan de Hanburgo para viajar a Venecia, que es un lugar del que su madre fallecida siempre les hablaba.

El motivo de la huída es que su tía desea adoptar solamente a Bo porque es el más pequeño y a Próspero, que es un pre adolescente, lo quieren dejar en un orfanato. Esto es recontra  Dickens y el fantasma de Oliver Twist está muy presente en toda esta propuesta.

Para evitar la separación los chicos huyen a Venecia donde se topan con una banda de chicos huérfanos ladrones (un elemento J. M. Barrie que rememora a los niños perdidos de Nunca Jamás) liderados por un joven y misterioso criminal al que llaman Escipión, quien se apoda como el título del libro.

Durante la primera parte de la novela Funke se concentra en la relación de los protagonistas con la banda y sus historias de vida, al mismo tiempo que se desarrolla la investigación de un detective privado contratado por la tía de los hermanos para contactar a los chicos.

Uno de los aspectos más fabulosos de la narración de la autora es la manera en que construye el escenario de la historia.

Este es un libro en el que literalmente vas a sentir que viajaste a Venecia, que en mi opinión es un personaje más de este relato. Funke te hace sentir que estás ahí con los protagonistas.

La novela tarda un poco en desarrollar el conflicto principal porque la autora se concentra mucho en desarrollar las relaciones de los chicos, pero después se vuelve más interesante con varios misterios y situaciones de enredos que revelan bastante secretos del misterioso Señor de los Ladrones.

Hubo dos cosas me encantaron de este libro.  En primer lugar la manera en que Funke construyó los personajes de los niños.

Los chicos son absolutamente realistas y hablan y se comportan como lo hacen en la vida real los niños. Los pre adolescentes actúan como lo hacen los jóvenes y en el caso Bo que es el más chico, tiene todas las características de un pibe de cuatro años.

No es tan común encontrar esa clase de realismo en la literatura juvenil y me pareció muy interesante lo que  hizo la autora.

Otra cosa que me gustó es la manera en que la historia trabaja los elementos de fantasía, que para mi estuvieron influenciados por Ray Bradbury, pero no quiero dar detalles para no adelantar cosas de la trama.

Lo interesante de la novela es que durante la mayor parte del conflicto todo se desenvuelve con mucho realismo y en la última parte aparecen elementos fantásticos que están trabajados con mucha sutileza y te sorprenden porque el libro no iba a por ese lado.

En el 2006 se hizo la adaptación cinematográfica de bajo presupuesto que sólo se conoció en Europa y no pude ver todavía.

«El Señor de los Ladrones» es un novela amena para empezar a conocer la obra de Cornelia Funke y la recomiendo.