Donde los árboles cantan

  Como le pasó a mucha gente,  este libro llamó mi atención primero por su portada y la hermosa ilustración de cubierta de Cris Ortega, una artista española que parece es bastante conocida en su país por su labor dentro del género fantástico.

Entonces sucedió que tomé esta novela y me encontré con la siguiente frase en la contratapa:

«Un relato de aventuras que recuerda a Stevenson, Scott o Dumas. La mejor novela de Laura, sin duda».

Era todo lo que necesitaba saber y como mi instinto literario me indicaba que lo iba a disfrutar lo compré.

Una vez más no me equivoqué.

Nunca había leído nada de Laura Gallego, que tiene un par de novelas editadas en nuestro país y la verdad que disfruté mucho de esta propuesta.

«Donde los árboles cantan» Es una historia de aventuras medievales que hacia la mitad del relato se fusiona con el género fantástico para brindar una loca historia de amor.

Viana, la hija del duque de Rocagrís, lleva una vida perfecta.

Es la próxima heredera de la tierra de sus padres y está prometida con el joven Robian de Castelmar, que está a punto de ser nombrado caballero del reino de Nortia.

Su vida se desarrolla con normalidad hasta que un numerosos ejércitos de salvajes, que podrían ser pictos, por la manera en que se los describe si bien nunca se los menciona de esa manera, conquistan Nortian y se cargan de manera brutal a todos los soldados del rey.

Las mujeres de la realeza son entregadas entonces a los jefes de las tribus para que puedan concebir hijos y se queden con las tierras.

Robian sobrevive la guerra pero traiciona a Viana cuando permite que su novia sea entregada a los conquistadores a cambio de servir a los invasores y no perder las propiedades de su familia.

A partir de ese momento la vida de la protagonista da un vuelco de 180 grados y para evitar ser violada y embarazada por los salvajes, Viana se escapa y termina en el Gran Bosque, un lugar al que nadie se atreve entrar por las extrañas leyendas que se cuentan sobre ese lugar.

El libro remite bastante a las clásicas aventuras de Walter Scott, como «Quentin Durward» con la particularidad que hacia la mitad del conflicto entran a jugar elementos de fantasía, que por otra parte fueron trabajados con mucha sutileza y por eso el giro que tiene  el libro no es brusco o incoherente.

Durante la primera parte de la trama la autora se enfoca en el cambio de Viana, que de ser una doncella remilgada pasa convertirse en un símbolo de los rebeldes de Nortia.

Ese aspecto está muy bien trabajado y se destaca en la trama la presencia de Lobo, un típico antihéroe de Robert Louis Stevenson, que es el encargado de entrenar a la chica para que pueda sobrevivir en el bosque.

Lobo es un noble desterrado que vive como renegado en la naturaleza y recuerda mucho a personajes de Stevenson como Alan Breck de «Secuestrado» y el pirata John Silver de «La isla del tesoro».

En la segunda parte de la trama entra en escena Uri, un personaje que se hace querer en esta historia, y proviene de un particular pueblo de origen fantástico, sobre el que prefiero no dar más detalles.

Algo que me gustó de esta novela es el trabajo que hizo la autora con el lenguaje de los distintos personajes, donde por medio de su expresión el lector puede percibir claramente sus orígenes sociales.

Un detalle interesante que generalmente suele ser pasado por alto en este tipo historias que se escriben en la actualidad.

Otra particularidad interesante es que la protagonista no es perfecta y durante el conflicto se la pasa tomando pésimas decisiones impulsivas que en algunos casos terminan en tragedia.

Este aspecto de Viana fue criticado por algunos lectores pero a mi me parece que contribuyó para darle más humanidad al personaje.

Donde los árboles cantan es una novela donde la sutileza resultó un factor clave en la narración de Gallego.

Es decir, hay elementos fantásticos pero la trama no se enfoca en ellos y el romance es tierno y emotivo sin llegar a ser un folletín para adolescentes.

Disfruté mucho este libro y me dieron ganas de buscar más trabajos de esta escritora.

Este lo recomiendo.