Retrospectiva Dark Universe: El gato negro (1934)

Antes que los organismos de censura se pusieran firmes en Hollywood, el cine de terror y muy especialmente la franquicia Dark Universe de Universal se volvió bastante densa con filmes que trataban temáticas muy oscuras.

El suceso comercial de estas propuestas generó que en ese momento el productor Carl Laemmle Jr. tuviera luz verde para hacer literalmente lo que quisiera y eso derivó en el estreno de esta clase de relatos macabros.

Resulta muy interesante estudiar estas películas de manera cronológica porque se puede apreciar como los contenidos de las historias se volvían cada vez más fuertes.

Por entonces habían pasado apenas dos años del estreno de Drácula y para 1933 la película de Todd Browning resultaba una obra liviana.

Luego del contundente debut de El hombre invisible el estudio presentó una de las películas más zarpadas de la franquicia, donde quedó claro que a los productores ya no les importaba nada con tal de impactar al público.

El gato negro incluyó entre su contenido rituales satánicos, necrofilia, consumo de drogas, torturas y psicópatas desquiciados.

Motivos por el cual hoy esta producción es considerada por muchos artistas relacionados con el género, como Stephen King, como una de las grandes obras maestras del terror.

Este fue un proyecto que le trajo muchos problemas a Laemmle padre, ya que por la naturaleza de las escenas de violencia y peor aun la situaciones pervertidas que se insinuaban, la película fue prohibida en varios países como Italia, Finlandia y Austria ya que la consideraban una obra ofensiva.

En el Reino Unido y Japón la estrenaron pero con numerosas escenas eliminadas.

No obstante, la gran atracción de este proyecto pasó por el hecho que reunió en una misma historia a Boris Karloff y Bela Lugosi, que por aquellos días sobresalían como las grandes estrellas del género.

El gato negro tomaba el título del cuento homónimo de Edgar Allan Poe pero en realidad la trama no tenía nada que ver y Laemmle junior utilizó el nombre del escritor como una atracción comercial para a atraer el publico.

La película se centra en una joven pareja de recién casados que viaja a Hungría para disfrutar de su luna de miel. En el camino conocen a un medico interpretado por Lugosi que planeaba visitar a un viejo amigo.

Cuando el micro que los traslada tiene un accidente, el grupo queda varado en el camino y el médico les ofrece refugio en la casa de su amigo, que es un arquitecto interpretado por Karloff.

Un personaje inspirado por el ocultista Alistar Crowley. Desde el momento en que aparece en escena queda claro que se trata de sujeto pervertido que tiene un comportamiento extraño.

Las cosas se complican cuando los jóvenes descubren que el médico que los ayudó guarda grandes rencores contra el arquitecto y se dirigió a ese lugar para cobrarse venganza por un hecho ocurrido durante la Primera Guerra Mundial.

Los pareja entonces queda atrapada en el medio de la disputa, en una casa que resulta ser el centro de reunión de una secta satánica.

¿Y que tiene que ver esto con un gato negro?

Nada pero el personaje de Karloff tiene un par de gatos que andan sueltos por la casa y contribuyen a justificar el título.

Al ver esta película queda claro que Laemmle junior hizo una lista con todas la perversiones que podía incluir en un argumento y las insertó en el guión, aunque el conflicto no tuviera mucho sentido.

El gato negro fue dirigida por el austriaco Edgar Ulmer, quien hizo un trabajo brillante con los momentos de tensión y las atmósfera de terror.

Lo interesante de esta película pasa por el hecho que el horror en estuvo vinculado con elementos fantásticos, sino que tenía un tratamiento más realista.

Es decir, el mal no estaba representado por un monstruo sino por la perversión humana. El rol de Boris Karloff, que lograba dar miedo, era un psicópata que podía existir en la vida real y eso generaba que la trama fuera más intensa.

Otra virtud de El gato negro fue que presentó una gran oportunidad para disfrutar a Lugosi y Karloff en roles completamente diferentes a los que solían trabajar en el cine.

Karloff encarnaba a un villano más complejo mientras que Lugosi, para sorpresa del público, era el héroe de la historia. El actor que quedó en el recuerdo por sus numerosas interpretaciones de vampiros, en este proyecto demostró que era un artista más versátil de lo que todo el mundo creía.

Lamentablemente la industria del cine luego lo encasilló en papeles similares a Drácula y nunca llegó a explotar en totalidad su talento.

En el momento de su estreno en Estados Unidos, este film no contó con mucho apoyó de la prensa que rechazó el sadismo de la trama, sin embargo se convirtió en el suceso taquillero más grande de 1934 para la productora Universal.

A raíz del éxito comercial los protagonistas luego volvieron a trabajar juntos en otras siete películas de la compañía.

Un Dato Loco para cerrar la nota.

Esta fue la única película que el director Edgar Ulmer hizo para un estudio importante de Hollywood, ya que luego de este trabajo el presidente de Universal utilizó sus influencias en la industria para que nadie contratara al cineasta.

¿Cuál fue el crimen de Ulmer para recibir semejante castigo?

El realizador se enamoró de la actriz Shirley Kassler e inició una relación con ella. El problema era que la mujer estaba casada con Max Alexander, el sobrino de Laemmle.

Cuando Alexander descubrió el engaño de su esposa le pidió a su tío que dejara sin trabajo al cineasta, ya que su conducta manchaba la reputación de la familia.

Ulmer nunca más pudo filmar para los grandes estudios pero continuó su carrera en el cine independiente clase B. El affair con la actriz resultó ser una relación seria y luego se casaron para seguir juntos el resto de sus vidas.

Lamentablemente el trailer original de El gato negro hoy se considera un material perdido pero este es un buen video que recrea el estilo que tenían los avances de cine en los años ´30.