Top 250: Películas de terror (39)

60-56

60-NIGHT OF THE DEMONS (1988)

Esta película se encuentra disponible en You Tube y si miran los comentarios de la gente en el video van a encontrar un punto en común,

Muchos la recuerdan como un clásico de la infancia, cuando la descubrieron entre los ocho y diez años.

Esto se relaciona con un tema que mencioné previamente en otro puesto de la lista.

En los ´80 nos permitían ver cualquier cosa y así fue que personajes como Freddy y Robocop luego se convirtieron en íconos infantiles.

Yo también descubrí Night of the Demons por aquella época y en ese momento obviamente me parecía aterradora. Hoy la disfruto más como una comedia de terror,

Un grupo de adolescentes organiza un fiesta de Halloween dentro de un mausoleo y despiertan a un ente maligno que resucita demonios y busca apoderarse de sus almas.

La dirección de arte de esta película fue fantástica y los efectos especiales para tratarse de una producción clase B no sólo estuvieron muy bien elaborados sino que además fueron efectivos.

Los miembros del reparto además tenían muy buena química entre sí,  donde sobresalió la participación de Linnea Quigley, una famosa scream queen de los años ´80.

La dirección de este film corrió por cuenta de Kevin Tenney, quien fue responsable de dos joyas del cine clase B que no llegaron a entrar en esta lista pero recomiendo.

Witchnoard (1986) , que tuvo una continuación en 1993 y La venganza de Pinocho (1996), un festín bizarro hermoso sobre muñecos malditos.

Sin embargo la obra más popular de su filmografía es esta  producción que con el paso de los años ue adquirió estatus de culto.

Night of the Demons tuvo dos continuaciones estrenadas en 1994 y 1997 y una remake en el 2009 que nunca llegué a ver.

De la trilogía original la mejor es la primera.

El avance en este link.

59-RE-ANIMATOR (1985)

Una de las mejores comedias de terror concebidas en los años ´80 que representa la obra más popular del director Stuart Gordon.

El proyecto representó la primera colaboración del cineasta con Jeffrey Combs y Barbara Hompton en una adaptación desquiciada del cuento de Lovecraft, «Herbert West–Reanimator.

Una propuesta que jugaba con el míto de Frankenstein y presentaba a un estidiante de medicina que creaba una fórmula para revivir a los muertos.

El dominio del humor negro de Gordon, sumado a un festival gore de violencia y situaciones zarpadas crearon una propuesta muy especial que en su momento contó con el apoyo del stablishment de la crítica norteamericana.

Una situación muy inusual ya que a menudo lapidaban las producciones clase B del cine bizarro.

A Re-Animator recién la descubrí en los ´90 ya que me la prohibieron en mi primera etapa de descubrimiento del género y formaba parte de la lista negra del video club, junto con El excorcista.

Estaba todo bien con Jason y Freddy  masacrando gente pero no había cuorum con la historia del doctor Herbert West y la famosa escena de la cabeza.

Si la vieron saben a que me refiero.

Cuando la vi entendí los motivos de la censura y me pareció un delirio muy entretenido por la complicidad que establecía con el público en materia de humor.

La obra de Gordon se convirtió en un clásico de los ´80 y tuvo dos continuaciones estrenadas en 1990 y el 2003.

El los últimos años la franquicia continuó en el campo de los cómics donde la editorial Dynamite reunió al doctor West con Ash de Evil Dead y Vampirella en miniseries muy entretenidas.

El avance en este link.

58-PHANTASM (1979)

Jason, Freddy, Michael Myers, Leatherface, Chucky, Pinhead (Hellraiser) y The Tall Man.

Esa es para mi la generación dorada del cine de terror moderno post Dark Universe del estudio Universal.

Dentro de esa galería de personajes icónicos The Tall Man tal vez es menos popular, ya que sus historias se desarrollaron dentro del cine de culto clase B.

Es decir, la mayoría de la gente que no es fan del terror puede identificar con facilidad a los otros personajes mencionados pero el protagonista de Phantasm nunca llegó a tener la misma masividad.

Esta película fue creada en el cine independiente por Don Coscarelli, quien estuvo a cargo del guión, producción, edición, fotografía, operación de cámara y dirección.

Para 1979 contaba con dos producciones en su filmografía (Jim the World´s Greatest y Kenny & Company), que habían estado destinadas a un público adolescente.

Sin embargo ambos títulos pasaron sin pena ni gloria por los cines y Coscarelli sintió que debía dedicarse al cine de terror para conseguir un éxito comercial en su carrera.

Lo que nunca pudo imaginar es el impacto que tendría eventualmente su labor en este género.

Con un equipo integrado en su mayoría por técnicos y actores amateurs y un presupuesto limitado de 300 mil dólares, el cineasta concibió esta propuesta que presentaba una interesante fusión de géneros.

En la trama había un fuerte hincapié en los elementos surrealistas que se combinaban con la ciencia ficción. Por consiguiente, la experiencia visual que ofrecía era muy diferente a las cosas que se hacían en ese momento en el género, donde predominaban las historias de psicópatas asesinos.

El argumento tenía como protagonista a un chico llamado Mike Pearson (A.Mike Baldwin), quien asistía al entierro de un hermano que había sido asesinado en misteriosas circunstancias en un cementerio.

Al finalizar el funeral el joven descubría que un hombre alto que trabajaba en la funeraria tomaba el féretro y lo escondía en un auto para luego desaparecer.

Con la ayuda de su hermano mayor y a un amigo de la familia, Mike investigaba los extraños hechos en el negocio del misterioso funebrero.

Lo que seguía a continuación era un cuento de horror bizarro que jugaba constantemente con la psicología del espectador.

¿Quién era el hombre alto que no tenía nombre? ¿Por qué escondía a los muertos?

No había una respuesta clara para esas incógnitas y la película lograba atraparte por la incertidumbre que generaba el conflicto y el destino de los protagonistas.

Angus Scrimm, quien era el único miembro del reparto que contaba con experiencia en el cine (siempre en roles secundarios), consiguió su gran protagónico en esta producción que lo haría famoso en todo el mundo.

La atracción principal que hizo famosa a esta película y eventualmente la convirtió en un clásico fue el tratamiento que presentó Coscarelli en los elementos surrealistas.

Las escenas de pesadilla del protagonista donde se presentaba al villano eran muy sólidas y tuvieron una clara influencia en la saga Pesadilla de Wes Craven.

La ambigüedad del conflicto, sumado a ese tinte existencialista que le otorgaba el director al relato, permitía que hubiera diferentes interpretaciones de la película y eso eventualmente la convirtió en una obra de culto.

En 1988 se estrenó la continuación que ofreció un espectaculo parecido al film original pero con un mayor presupuesto.

La saga continuó con otras tres entregas, la última estrenada en el 2016.

57-SLEEPY HOLLOW (1999)

Sleepy Hollow fue un proyecto que el estudio Paramount concibió a comienzos de los años ´90 con la idea de evocar los slashers de los años ´80.

En ese momento todavía no había explotado el subgénero con Scream y por ese motivo le otorgaron al film un presupuesto muy limitado,

Originalmente iba a ser dirigida por Kevin Yagher, el creador de los efectos de maquillaje de Freddy Krueger y el custodio de la cripta en la serie Tales from the Crypt.

Debido a una serie de diferencias creativas entre el artista y los ejecutivos del estudio la película se pinchó y la idea quedó archivada.

A raíz del suceso de Wes Cravem y la nueva popularidad del slasher a fines de los ´90 revivieron La tradicional leyenda del jinete sin cabeza con Tim Burton.

Yagher fue convoado otra vez en el rol de especialista de maquillaje y efectos especiales.

Burton la rompió con una película que se filmó con 70 millones de dólares y terminó por recaudar más de 200 millones alrededor del mundo.

En lo personal la destaco entre las mejores colaboraciones del realizador junto a Johnny Depp y con el paso del tiempo se convirtió en un clásico que envejeció de un modo impecable.

De Sleepy Hollow adoro la puesta en escena comiquera, la reverencia de Burton a los clásicos  de horror góticos de la productora Hammer y el sentido del humor macabr que presenta el guión.

La trama no se toma en serio a sí misma y Depp hace un trabajo formiable en ese aspecto con su interpretación de Ichabod Crane.

56-NOSFERATU (1922)

No sé que tiene esta película pero siempre me pareció aterradora.

Hay algo hipnóico y cautivante en la interpretación de Max Schreck que hizo de esta propuesta una experiencia muy especial, que por supuesto fue potenciada por la famosa leyenda urbana en torno al artista.

De acuerdo al mito de la época Schreck era un vampiro real que mordió en serio el cuello de la protagonista en el acto final.

La falta de información en torno a su vida también generó que se difundieran todo tipo de delirios en torno a su persona.

Nosferatu fue la primera adaptación clandestina del Drácula de Bram Stoker, cuyos herederos demandaron al director Friedrich  Murnau por plagio.

Una corte avaló la denuncia y ordenó que se quemaran todas las copias del film.

Afortunadamente unas pocas copias se preservaron y de se modo se salvó una obra magnífcia que tuvo una influencia descomunal en el cine de terror que vendría después.

Existen varias versiones de este film en dvd.

En mi colección tengo una edición que salió a la venta en su momento en Argentina que incluye la fotografia con colores en sepia y una banda sonora metalera.

Dos elementos que contribuyen a crear una experiencia muy especial.

De este puesto se desprenden dos recomendaciones.

En 1979 se estreno la remake con dirección de Werner Herzog y Klaus Kinski en el rol del villano.

La película fue aclamada por la crítica y se convirtió en un clásico de esa década.

En lo personal siempre me pareció un bodrio que nunca consiguió engancharme, más allá de los aspectos visuales que estaban muy bien logrados.

La narración de Herzog es tediosa y Kinski presenta por lejos la peor encarnación de Drácula al que convierte en un emo pusilánime que genera más bostezos que miedo.

Otra propuesta más interesante es la producción de Nicolas Cage, Shadow of the Vampire (2000), que juega con la leyenda urbana en torno a Schreck.

En este caso se narra los hechos que reodearon a la filmación de Nosferatu con la particularidad que el protagonista es representado como un vampiro real.

John Makovich encarna al director Murnay y un soberbio Willem Dafoe a Schreck.

Películón.

Si nunca vieron este film les recomiendo que vean primero la obra original para captar todas las referencias, al margen que es un clásico del cine que no se puede desconocer.