El horror de la casa de Gloucester

TERCERA PARTE

ROSE

Cuando se dice que Rose fue la pareja perfecta de Fred West no es una exageración.

El asesino y violador había encontrado a su versión femenina en la chica que conoció mientras repartía el pan, que también tenía un pasado miserable y oscuro.

Por eso no es de extrañar que la unión de ellos derivara en una de las historias de crímenes más escalofriantes y terribles que ocurrieron en las últimas décadas.

Rosemary Letts había nacido el 20 de noviembre de 1953 en Devon, Inglaterra.

William Letts era un esquizofrénico que solía castigar brutalmente a sus hijos con cintos. Su esposa Daisy era una mujer muy depresiva que terminó internada en un hospital en 1953, donde recibió terapia de electroshock mientras estaba embarazada.

No fueron pocos los médicos que afirman que esto produjo serios daños en el cerebro de Rose antes que naciera.

Al crecer la chica se manifestó con serios problemas de aprendizaje en la escuela y tenía un carácter sumamente violento.

Los compañeros que la cargaban por ser gorda cuando terminaron seriamente golpeados dejaron de molestarla.

En casa era la hija favorita de William Letts y por lo general solía salvarse de los castigos que recibían el resto de sus hermanos.

Por aquel tiempo su padre solía abusar de ella constantemente y esto despertó en ella una obsesión con el sexo desde muy chica.

En la escuela acosaba a los varones y en su casa llegó a abusar de uno de sus hermanos menores.

Antes de cumplir 16 años, Rose tenía más experiencia en el sexo que cualquiera de las chicas de su edad que vivían en Devon.

Como su padre le prohibía tener novios ella satisfacía sus necesidades sexuales con los hombres adultos del pueblo.

Daisy cansada de los abusos físicos que recibia ella y sus hijos por parte de sus esposo decide dejar al hombre y se muda a otra casa con los chicos.

Sin embargo, un tiempo después Rose abandona a su madre para irse a vivir con William.

En este período conoce a Fred West y la química es absoluta desde el primer momento.

Ambos son dos desenfrenados sexuales que disfrutan con las relaciones violentas.

Fred por fin habían encontrado a alguien que lo seguía a la par, aunque fuera unos años menor que él.

Rose poco tiempo después queda embarazada de una nena que se llamaría Heather. La joven decide irse a vivir con Fred y al poco tiempo reciben un golpe.

West es finalmente arrestado por varios robos cometidos en la zona donde viven y termina en la cárcel.

De esta manera, Rose se encontró sola con un bebé en camino  y al cuidado de los dos hijos de Fred de su matrimonio anterior, Charmaine y Anne Marie.

Su novio en la cárcel y los crios que la hacían volvér loca convertían al lugar en un caos.

Ella se descargaba golpeando a las niñas.

En 1970 nace Heather mientras Fred seguía en prisión.

Rose estaba desencajada. No contaba con dinero y tenía que cuidar y dar de comer a dos crías de una puta que ya formaba parte  del pasado de su hombre.

Un día estalló de furia y la pequeña Charmaine fue la que pagó al precio más caro.

El castigó se fue de las manos. Esa vez no se terminó con unos cuantos golpes, sino que se quitó la furia contenida cuando la estranguló y la niña terminó muerta.

Ella se hizo cargo del cuerpo. Primero le mintió a Anne Marie diciendo que Rena Costello se había llevado a su casa a la pequeña Charmaine.

Luego procedió a descuartizarla para esconder bien los restos humanos que enterró en el piso de la cocina.

Cuando Fred quedó en libertad ni se inmutó. Despues de todo la niña ni siquiera era hija suya y ya bastante la había mantenido mientras su madre se fue a Escocia.

West conservó los dedos y las rótulas del cadáver por si algún día las cosas se complicaban con Rose.

En caso de que quisiera joderlo él tenía la evidencia del crimen que su mujer había cometido.

Ahora tenía que lidiar con otro inconveniente que sin embargo presentaba una gran oportunidad para Fred:  Su ex esposa.

Hacia rato que quería liberarse de ella de una vez por todas y esto le venía como anillo al dedo.

Rena Costello quería ver a sus hijas y se presentaba en su casa reclamando la presencia de las niñas.

Fred y Rose decidieron tomar cartas en el asunto.

Rena quería ver a la pequeña Charmaine.

Muy bien, ellos se iban a encargar que madre e hija se unieran para siempre.

La mujer finalmente entró un día a la casa de West y nunca más se supo de ella.

Fred y Rose la estrangularon y luego el hombre se encargó de mutilar el cuerpo para facilitar el entierro.

El asesino escondió los restos en una zona cercana donde tiempo atrás habia enterrado el cadáver de su amante embarazada Anna McFall.

No podían seguir viviendo en el mismo lugar ya que la extraña desaparición de Charmaine se podría convertir en un problema con los vecinos.

Decidieron mudarse al centro ubano de Gloucester y la casa de la calle Cromwell fue la morada perfecta para ellos.

Durante los siguientes años el lugar fue el centro de terribles horrores perpetrados contra chicas adolescentes.

Anne Marie no sólo era violada por su padre y protituida en el negocio que tenían los West, sino que además el padre de Rose, William Letts solía también visitar el lugar para encamarse con su hija y la chica.

En la casa de la calle Cromwell las cosas empezaron a complicarse cuando Heather le habló a sus amigas sobre las cosas que le hacían sus padres.

Los West habían tenido la reputación de una familia decente, al menos esa era la imagen que daban, perro los rumores sobre el abuso que matrimonio ejercía con sus hijos empezaron a sonar en el barrio.

Eran rumores aislados pero los comentarios llegaron al desquiciado matrimonio y castigaron a Heather.

Si la prostituta Katherine Halliday que trabajaba con ellos hubiera hecho un escándalo o hubiera manifestado temor probablemente hubiera muerto.

Sin embargo, se manejó de manera inteligente. Directamente se fue de la casa para nunca más volver.

Cuando su novio hizo la denuncia y el ahora detective Hazel Savage tomó cartas en el asunto,  el final de los horrores en la calle Cromwell se precipitó.

Tenían una denuncia por abusos de menores y prostitución.

Volvemos otra vez al 6 de agosto de 1992.

La policía llegó a la casa de los West acompañada con una asistente social.

El matrimonio recibió a los detectives tranquilos, después de todo eran conocidos en el barrio como una familia normal que no tenía nada que esconder.

La asistente social Janet Leach se llevó aparte a los niños y uno de los chicos dijo algo que jamás sería olvidado por la mujer:

«Si quiere encontrar a mi hermana Heather, debe buscar en el jardín».

Concluye mañana.