Top 250: Dr. Strangelove, Network y To Be or Not to Be

En esta entrega quiero resaltar tres películas que suelen liderar las listas académicas de críticos o agrupaciones como el American Film Institute en torno a la comedia.
En mi recopilación quedaron afuera porque no suelen ser propuestas que repaso con la finalidad de buscar una carcajada.
De hecho, salvo por una de ellas no me parecen graciosas en absoluto.
No obstante, en un informe de este tipo no puedo esconderlas debajo de una alfombra y si te gusta el cine en algún momento tenés que experimentar su visionado.
Reitero, no forman parte de mis preferidas pero son clásicos icónicos que no se pueden desconocer.
Vamos con un repaso en orden cronológico.
-TO BE OR NOT TO BE (1942)
El director Ernst Lubitsch integra la lista de los grandes próceres de la comedia hollywoodense.
Pertenece a esa camada de cineastas que lograron sobrevivir de manera exitosa la transición del cine mudo al sonoro.
Su gran especialidad fue el humor donde elaboraba enredos sofisticados con argumentos que presentaban contenidos interesantes.
Para mi gusto su mejor película es el super clásico de fantasía El cielo puede esperar (1943) que incluí en la lista de esa temática. La remake con Warren Beatty es una de las mejores versiones modernas.
Un año antes de estrenar esa película Lubitsch se metió en un quilombo bárbaro al presentar una de las comedias más controversiales de todos los tiempos.
To Be or Not to Be fue la primera producción que trabajó el humor en torno al nazismo y el Holocausto con la particularidad que el film se exhibió en un momento donde la Segunda Guerra Mundial no estaba definida.
La trama comienza en 1938 antes de la invasión nazi a Polonia y presenta a una compañía teatral que prepara una obra donde se burlan de Hitler.
Eventualmente la situación política se desmadra y los artistas usan sus habilidades histriónicas para engañar a los nazis y escapar del país.
Una película muy loca que se centra en la comedia de enredos pero también juega con el drama y el suspenso.
El tema con esta propuesta es que trabajaba el humor con un tema muy delicado en un momento donde un montón de gente estaba muriendo en Europa o terminaba prisionera en los campos de concentración.
Las primeras reacciones hacia el film fueron muy polémicas por esta cuestión ya que se la consideró de mal gusto.
Lubitsch se tomaba en joda a Hitler en el peor momento de la guerra y la película fue criticada por la irresponsabilidad del director y sobre todo su insensibilidad sobre el tema.
Sin embargo también tuvo sus defensores que encontraron en la sátira de las ideologías fascistas una catarsis sobre la amenaza que se vivía en ese momento en el mundo.
Hoy se la considera una obra maestra del género y también es recordada como la mejor película de la protagonista, Carole Lombard, quien falleció en un accidente aéreo dos meses antes del estreno.
En1983 se hizo una remake con Mel Brook que también es muy buena y desde 1988 la versión teatral sigue vigente en diversos países.

-DR.STRANGELOVE (1964)

Una inusual incursión en la comedia de Stanley Kubrick que hoy es celebrada entre las mejores sátiras que se concibieron en las últimas décadas.
Siempre tuve sentimientos encontrados con esta propuesta que me parece genial el modo en que aborda la parodia política de la Guerra Fría de los años ´60 pero creo que las escenas desopilantes son limitadas.
Salvo por los secuencias de Peter Sellers en el salón de guerra el resto del contenido es un bodrio y cuenta con numerosos baches narrativos hasta que llegan los mejores momentos.
Este género claramente no era el mayor fuerte de Kubrick y Sellers levanta el espectáculo con los diversos personajes que interpreta.
No se puede dejar de reconocer que la sátira del contexto político de los años ´60 es ingeniosa y lo más triste de todos es que no perdió vigencia, ya que el absurdo de las amenazas nucleares sigue presente en la actualidad.
Pese a todo, también hay que mencionar que la mayor parte del contenido humorístico no envejeció bien y hay una postura muy snob en la prensa a la hora de glorificarla a niveles demenciales.
Como mencioné varias veces no todos nos reímos de las mismas cosas y me parece perfectamente válido si alguien no conecta en absoluto con esta película.
Si nunca la viste de todos modos recomiendo darle una oportunidad y dejarse llevar por la experiencia.

-NETWORK (1976)

Un caso muy especial ya que se trata de una producción que representó como pocas el cinismo que primó en el cine hollywoodense de los años ´70 y que en ese momento se consideraba una propuesta cómica.
El tema es que la película eventualmente se convirtió en una profecía que 40 años después se hizo realidad en el siglo 21.
Creo que alguien que nunca vio esta producción va a tener serias dificultades en encontrarla graciosa debido a que retrata a la perfección la realidad de los medios de comunicación de estos días.
Sidney Lumet elaboró una obra completamente adelantada a su tiempo con una lucidez escalofriante para adelantar un panorama aterrador donde los canales de noticia son en esencia un circo mediático utilizado para manipular a las masas.
La construcción de un relato para influenciar la opinión pública, el implemento del sensacionalismo para convertir tragedia sociales en entretenimientos masivos y la apuesta permanente al morbo y la violencia con el fin de mantener idiotizado al público son parte de los temas que trata esta producción.
Basta con ver lo que fue hace unos meses el tratamiento mediático que se le dio al juicio por el crimen de Fernando Báez Sosa.
Network en su máxima expresión.
Ni hablar de los mamarrachos disfrazados de periodistas serios y profundos, comprometidos con la “realidad”, que salen a entrevistar vecinos de Rosario con chaleco anti-balas con la intención de imprimirle un mayor dramatismo a la crónica. De hecho, no es casualidad que de fondo siempre utilicen música de película para acompañar las imágenes.
Network en su mayor expresión.
La trama tiene como protagonista a un periodista veterano de la tele (Peter Finch) que anuncia su suicidio delante de las cámara tras recibir la notificación de sus despido.
El canal para el que trabaja explota la expectativa por ese hecho para conseguir un mayor índice de audiencia.
En 1976 este film fue un enorme éxito de taquilla y obtuvo nueve nominaciones al Oscar donde ganó en las categorías de Mejo actor (Finch), actriz (Faye Dunaway), actriz de reparto (Beatrice Straight) y guión original.
El de mejor película lo perdió con Rocky.
Desde el 2017 este film cuenta con su versión teatral que se originó en Broadway.
En Argentina fue adaptada por el director Juan Campanella con Pablo Rago, Florencia Peña, Coco Silly y Eduardo Blanco.