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Saturday Night : El nuevo film de Jason Reitman

Saturday Night es la segunda película que estrenaron en el 2024 los realizadores Jason Reitman y Gil Kenan luego de Ghostbusters: Frozen Empire.

A diferencia del film que vimos en los cines a principios de este año el estudio Sony le soltó la mano al proyecto de los cineastas que no consiguió distribución internacional.

Pese a que tuvo una campaña promocional paupérrima la película cosechó reseñas positivas en el público y la prensa.

La trama retrata la crónica de lo que fue la caótica producción de la primera emisión del programa Saturday Nighth Live en el canal NBC el 11 de octubre de 1975.

El proyecto gestado por el productor Lorne Michaels reunió a un grupo de comediantes desconocidos que pertenecían al circuito under de la comedia stand up y no tenían experiencia en la televisión.

Entre ellos se encontraban Chevy Chase, Dan Aykroyd  y John Belushi, quienes años después se convirtieron en estrellas de cine populares, un camino que seguirían numerosos integrantes del elenco a lo largo de cinco décadas.

La película de Reitman, que se encuentra entre mis favoritas de este año, evoca con mucho humor la tenacidad y resiliencia de Michaels para sacar adelante una propuesta por la que nadie daba un peso y que estaba destinada a quedar en el más absoluto olvido.

Se pueden resaltar dos grandes virtudes en esta producción que contribuyeron a que el espectáculo resultara tan satisfactorio.

La narración dinámica e inmersiva del director captura la atención del espectador de inmediato y desarrolla la trama como si se tratara de un thriller.

Aunque ya sabemos como termina la historia, Reitman genera un clima constante de tensión al mismo tiempo que reconstruye el ambiente de la televisión estadounidense de los años ´70.

Su dirección desarrolla el relato con estupendos planos secuencias que recrean la vorágine de lo que fue esa jornada al mismo tiempo que cubre cada uno de los campos artísticos y ejecutivos que conforman la puesta en escena del programa.

El diseño de producción es alucinante y captura con numerosos detalles el ambiente cultural de los años ´70.

Saturday Night sobresale también por el casting brillante de artistas que reunieron para interpretar a la primera camada de comediantes que integró el show.

Más allá de los parecidos físicos, que en algunos casos son impactantes, cada miembro del elenco retrató de un modo excepcional la personalidad de los roles que encarnaban.

 

Me sorprendieron gratamente Dylan O´Brien (Maze Runner) quien le da vida a un joven Dan Aykroyd y Cory Michael Smith (Carol) como Chevy Chase. 

Gabriel Labelle (The Favelmans) deja una muy buena impresión como Lorne Michaels pero hay una figura que me voló la cabeza y sobresale especialmente dentro del reparto.

Nicholas Braun.

Un actor que debutó en la subestimada película de Disney, Sky High (con Kurt Russell) y es hijo del famoso diseñador gráfico, Craig Braun, quien creó la icónica lengua de los Rolling Stones.

La labor de este muchacho es simplemente escalofriante.

Nicholas encarna dos roles donde le da vida de un modo muy especial al comediante Andy Kaufman y a Jim Henson.

La labor que presenta con el creador de los Muppets es muy fuerte de ver porque te hace olvidar que te encontrás frente a una obra de ficción.

Esto no es una exageración y lo van a comprobar por su cuenta cuando vean la película.

La escenas que aparece Henson te ponen la piel de gallina porque parece el artista real salido de alguna imagen de archivo.

El modo en que Braum capturó la voz, la postura corporal y la energía de su personalidad es muy impactante.

La trama también retrata con acierto la enorme incomodidad que sentía Jim en Saturday Night donde su labor no era apreciada, debido a que las marionetas eran consideraban objetos infantiles.

Unos años después tendría su revancha cuando la televisión inglesa le dio la oportunidad de desarrollar su visión en El show de los Muppets.

La interpretación de John Belushi quedó a cargo del desconocido Matt Wood, quien presenta un notable parecido fisico con el comediante.

Si bien sus intervenciones son divertidas en lo personal lo sentí un poquito exagerado y la culpa no es del actor sino del modo en que el guión retrata al artista.

Belushi por momentos parece un sociópata descontrolado que recuerda al baterista Animal de los Electric Mayhem en la serie de los Muppets.

Reitman y Kenan en el guión optaron por representarlo como una caricatura y el personaje nunca consigue trascender del perfil del loquito descontrolado.

Entre las figuras más conocidas del elenco se destacan en roles secundarios Willem Dafoe y J.k Simmons, quien encarna a Milton Berle.

Un comediante que quedó en el recuerdo en Hollywood por el tamaño prolongado de su pene.

Obviamente no faltan las referecias a ese tema.

La mayor debilidad de esta película creo que se encuentra en el guión.

A Saturday Night tal vez le faltó profundizar un poquito más en la introducción de los personajes para no dejar afuera a los espectadores que no están tan familiarizados con la historia del famoso programa.

Si no contás con información previa te quedás afueras de varias escenas graciosas y esto puede repercutir en la experiencia de visionado de cada espectador.

No puedo dejar de destacar el afiche promocional con las tradicionales caricaturas que eran habituales de encontrar en las comedias de los años ´70.

Si les interesa el tema ya la pueden encontrar en el puerto de Jack.

Calificación: A-

 

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